“Tuve pensamientos que no son buenos, es un tema sensible... Tocar fondo me hizo abrir los ojos”

“El jugador muchas veces hace un esfuerzo totalmente desgastante sin sentido. Al estar lejos de mi familia, no sumar minutos y todas esas cosas, me llegaron pensamientos que no están buenos”. Con esa reflexión, Alexis Sabella (24) comienza la segunda parte de su entrevista con AS. El volante de Magallanes sufrió una dura depresión cuando todavía jugaba en su país natal.

Sabella, formado en San Lorenzo, estuvo a préstamo en Platense durante la temporada 22/23. Cuando apenas superaba los 20 años, vivió uno de los momentos más difíciles de su carrera y llegó a decir una frase preocupante: “Me duele mucho no tener más ganas”. En conversación con este medio, repasó esos oscuros días.

“Es un tema muy sensible que nunca toco porque me cuesta hablarlo. Por eso es importante que todos los chicos que no se sientan bien lo vayan hablando con profesionales. A mí me cuesta mucho hasta el día de hoy, pero me estoy soltando más con mi familia. Yo les puedo dar el ejemplo y ese consejo les va a ayudar mucho en lo personal y dentro de la cancha", dice Sabella.

- ¿Tuvo la posibilidad de hablar con alguien del club en ese momento?

- Quiero mencionar a la gente de Platense que estuvo conmigo en todo momento. A mis compañeros, a Gonzalo Valdivia y Gastón Suso, que era el capitán, estoy muy agradecido de ellos. La gente de Platense fue la que realmente me ayudó y estuvo conmigo todos los días. También estoy muy agradecido del DT Martín Palermo, tuve una conversación muy emotiva con él y me ayudó mucho.

- ¿Cómo logró salir adelante?

- Me ayudó mucho mi familia. Me di cuenta de que hay muchas cosas que no son realmente importantes. Lo más relevante es la salud mental, estar bien y laburar para el fútbol y para el sueño que uno quiere alcanzar. A veces tocar fondo te hace abrir los ojos para seguir por el camino que uno sueña desde chico. Hoy mi cabeza es otra cosa y sólo pienso en jugar.

- ¿Cómo se siente hoy?

- Es otra etapa de mi vida. Me ayudó mucho todo lo que me ha pasado en la vida, las cosas buenas y las cosas malas. Estoy muy agradecido de todo, porque eso es lo que me trajo hasta donde estoy hoy. Me ha hecho crecer en lo personal. De ahora en adelante, todo es puro crecimiento.

- ¿Cómo recuerda sus inicios en el fútbol?

- Fue clave mi viejo, me acompañó un montón, desde chico veníamos buscando esto. No tenía otra cosa en la mente que fuera jugar al fútbol y sabía que lo podía lograr. Mis inicios fueron de mucho esfuerzo. Estoy muy agradecido de mis padres que fueron un pilar fundamental. Después apareció San Lorenzo, que me abrió las puertas y confió en mí. Por eso le tengo tanto cariño al club, me hizo crecer mucho no sólo como jugador, sino también como persona. Todo lo que me ha pasado hasta el momento ha sido puro crecimiento. Si me he mandado alguna cosita fue de pendejo, pero ahora es otro momento de mi carrera. Estoy al lado de mi familia en todo momento, hablo con ellos todos los días. No pienso en otra cosa que no sea jugar al fútbol y en mi familia.

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