Volvió a su ciudad y enfrentará al club que lo vio nacer en Copa Chile: “Se me cayeron las lágrimas”

Eduardo Vidal (30) aparece en el hall del Hotel Costaustralis y rápidamente exhibe una sonrisa. El lateral de Deportes Puerto Montt acaba de llegar a Puerto Natales, su ciudad, y este viernes vivirá un momento especial: por la Copa Chile, el jugador enfrentará al Deportivo Bories, el equipo que defendió durante su niñez.

“Cuando empezó todo esto, nunca me imaginé que en el sorteo se podía generar este cruce y venir a jugar acá. No vi el sorteo, porque estaba en un compromiso, pero cuando me enteré, el teléfono explotó. Vi que salió Puerto Montt con el Bories y se me cayeron las lágrimas”, cuenta Vidal, muy alegre, en charla con AS.

- ¿Por qué?

- Porque yo salí de los 13 años de acá, en busca de mi sueño en el fútbol, con mis papás. Como anécdota, siempre le decía a mi papá: ‘Puta que sería lindo que Natales tenga un equipo profesional y poder jugar para mi ciudad, o venir como profesional a jugar a mi ciudad’. Él me decía ‘sí, pero es difícil’. Y obviamente era imposible, pero hoy se hizo realidad.

- ¿Qué más le dicen sus padres?

- Imagínate que ellos nunca han tenido la posibilidad de verme jugar juntos. Siempre alternaban... Desde que tengo uso de razón, jugué en el Bories. Entonces, siento que es un sueño que estoy cumpliendo y me doy por pagado. Y bueno, con mucho respeto, ojalá podamos llevarnos un buen resultado.

- ¿Hace cuánto que no venía a la ciudad?

- Yo viajo todos los años para acá. Para mí, las Navidades y las fiestas son sagradas en Puerto Natales con mis papás. Ahora, mi mamá está un poco delicada de salud y necesitaba verla con urgencia. La ciudad siempre se extraña y hoy estoy en Puerto Montt, un lugar muy lindo también, así que estoy muy feliz.

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- ¿Qué le pasó a su madre?

- Fue operada por displasia de cadera. Tiene que estar un año en reposo, en cama prácticamente, porque le pusieron una prótesis... Pero hoy tuve la sorpresa de que me fue a ver al aeropuerto. Fue con un burrito y la verdad es que se me pusieron los pelos de punta, porque es mi mamá. Soy su único hijo y fue mágico.

- ¿Está preparado para recibir alguna puteada del público en el partido o cree que será respaldado?

- Ya llevo 11 años como profesional y el cariño siempre ha sido recíproco con la gente de Natales. Yo creo que es muy difícil que eso pase, ojalá no me equivoque (sonríe).

- ¿Celebrará si hace un gol?

- No, no lo celebro. Lo hablé con mi papá recién. No lo haría porque es mi ciudad y es el club de dónde vengo. Como se dice, ‘que gane el más mejor’ (sonríe).

- Hace unos días, usted compartió en Facebook una foto cuando era un niño, con la camiseta del Bories. Era el inicio de los sueños...

- Sí, yo nací con la pelota. Para los natalinos es muy complicado emigrar y es muy difícil salir adelante, sobre todo en el fútbol. Somos muy pocos los que hemos llegado al profesionalismo, pero siempre tuve la ilusión, de la mano de mis pilares, que son mi mamá y mi papá... Creo que sin ellos hubiese sido muy difícil. Llevo 11 años de carrera, que no es menor, me he mantenido, que es lo más difícil, así que eso me engrandece. Ser un orgullo para mi familia y la gente que me quiere es un privilegio.

- ¿Cuánto le debe al Bories?

- Mi infancia completa, porque estuve de los seis a los 13 años... Yo soy del Bories y del Salesiano, mi colegio, al que también quiero mucho. Hice toda mi básica ahí y todavía tengo contacto: la ‘profe’ Miriam, el ‘profe’ Patricio Montiel... No me olvido de dónde vengo y creo que eso, la gente de acá lo siente mucho.

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- Y respecto a su carrera, ¿cree que ha cumplido las expectativas que tenía ese niño que soñaba con ser futbolista?

- Sí. Tener satisfecha a mi familia y poder ayudarla es lo más gratificante para mí. Además, cuando estaba en Cobreloa, a mí se me premió como un deportista destacado de la ciudad y me pegué el pique desde Calama a recibir ese premio. Eso ha sido lo más lindo que me ha pasado. Estoy súper agradecido.

- ¿Le falta algo por cumplir en su carrera?

- Sí. Me quedan de seis a siete años de carrera, estoy en una edad muy madura en lo futbolístico y psicológico, y ojalá que pueda hacer un par de años en Primera. ¿Un equipo? Me encantaría cumplirle el sueño a mi papá de jugar en la U. Los dos somos hinchas del club siempre íbamos al estadio cuando chico. Yo creo que ahí mi viejo se muere tranquilo (sonríe).

- La última. ¿Qué explicación le podría dar el hincha de Puerto Montt por el mal momento en el Ascenso? Llevan seis puntos en seis partidos…

- Sí, lógico. No hay que dejar al margen lo que está pasando en el campeonato. Creo que el Ascenso está demasiado competitivo, incluso más que la Primera... Dios quiera que el partido con el Bories nos dé un envión, para ya enfrentar a San Luis la otra semana. Y respecto a los hinchas de Puerto Montt, ellos son muy cercanos y nos han apoyado en todo momento. Tenemos un cuerpo técnico que trabaja bien, que conoce la división, así que esperamos que los resultados vengan.