El arquero chileno que cambió la historia en Santiago 2023: “Si pudiera jugar todo el día, lo haría”

La Roja masculina de hockey césped hizo historia en Santiago 2023. Por primera vez en las Juegos Panamericanos, el conjunto nacional disputará la medalla de oro y avanzó a esta etapa tras una emocionante victoria por ‘penales’ ante Canadá (3-2). En el tiempo regular, el duelo terminó igualado 1-1.

Adrián Henríquez, arquero de Chile, fue la gran figura en la definición. El “Mono” tapó el que pudo ser el gol del triunfo de los norteamericanos en el último segundo de juego y luego atajó tres lanzamientos en los shoot-out. El guardameta conversó con AS Chile, revelando detalles de la importante victoria lograda.

“La tapada más importante fue el primer córner del partido. Era importante cerrar y decir “oye, esto no es llegar y llevar nuestro orden defensivo’. Nos salió bien. Después nos metieron un gol, pero hay un tema arbitral que yo discrepo… le pega en el brazo a uno de nuestros corredores, pero no importa, lo bueno es que no nos sacó del partido, seguimos defendiendo bien y nos quedamos con el partido”, afirmó Henríquez.

“Yo me defino como un amante del hockey. Dejé todo por el hockey ahora, ya más de viejito. Dije “no me quedan muchos años de carrera profesional, así que le voy a dar con todo” porque no me imagino la vida sin jugar. No me imagino un martes o un jueves en la noche en la casa… desde los nueve años que estoy entrenando a esa hora en el club”, agregó el portero de la Roja de Hockey Césped.

- Tuvo que hacer varios sacrificios...

- Me voy tres meses a vivir a Alemania y después vuelvo. Dejo a mi polola acá y por suerte ella me aguanta todo ese show. El hockey es lo número uno… tener estas alegrías son significativas para mí. Mi mundo de locura es todo esto, estoy contento del alma.

- ¿Fueron muy difíciles los ‘penales’?

- No tenía mucha información de los canadienses, en verdad teníamos confianza en que lo íbamos a ganar en el tiempo regular. Pero entrenamos bien los shoot-out, con harta paciencia, así que se dio con lo justito.

- Sus compañeros destacan que se queda siempre hasta el último en los entrenamientos...

- A veces (ríe), pero yo creo que es porque soy el último en cambiarme la ropa. Pero sí, me gusta esta cuestión, ¿para qué andamos con cosas? Si pudiera jugar hockey todos los días, todo el día lo haría. Es así de simple. Ante la duda, yo prefiero entrenar. Entre el gimnasio y el hockey, no me gusta estar mucho en la casa.

- ¿Las atajadas fueron dedicadas a la polola entonces?

- Absolutamente. Si te dijera lo contrario, me llegaría un reto enorme, así que a la Cote, si es que lee esto, van dedicadas para ella.