Es chilena y sorprende en este deporte: “Me miraban como el bicho raro, pero acá soy feliz”

Luego de extensas jornadas del Copec RallyMobil, Josefa Braun al fin puede descansar tras la última etapa en Osorno que le puso fin a la temporada 2024. La chilena cumple una importante misión dentro de esta competencia, ya que por segundo año consecutivo fue la piloto del vehículo de seguridad (auto 0).

Apenas se baja de la Maxus T90, saluda con una gran sonrisa y accede a conversar con As Chile. “Siempre he sido parte de este mundo, ando en moto, en bici, hago snowboard, nunca he sido muy tranquila. Yo soy la mayor de tres hermanos y siempre hice hartas cosas con ellos, ahora ellos corren, de hecho en esta fecha uno de ellos (Augusto) debutó como piloto y el otro (Benjamín) hace Cross Country, entonces es una pasión que nos une mucho como familia”, asegura.

- ¿Cómo surge la posibilidad de ser piloto del auto de seguridad?

- Ha sido todo trabajo y un poco de suerte también. Al Rally llegué el 2007, después empecé a venir con un equipo y luego de eso me llamaron para ser navegante del auto de seguridad, hasta que el año pasado me llamaron y me preguntaron si me atrevía a manejarlo. Fue imposible decir que no, apenas acepté llamé a mi mamá, a mi pololo y les conté que iba a manejar el auto 0.

- Igual es una gran responsabilidad la que tiene...

- Sí, porque somos tres autos los que cumplimos esta función. Nosotros principalmente vamos viendo que la gente respete las zonas establecidas para ellos, también que no hayan animales como pasó en esta fecha que una vaca se metió en el camino y ahí tuvimos que avisar para que la pudieran sacar (ríe). En el fondo nos preocupamos por todos los detalles para que un evento así de grande funcione con toda la seguridad posible.

- ¿Qué es lo más complicado de tener esta función en una competición como el RallyMobil?

- Es cansador recorrer todos los circuitos, porque al final tu concentración pasa por todas partes. Uno está concentrada en ver la ruta, en escuchar la radio, en escuchar al navegante, estar pendiente de los choques, acá en Osorno por ejemplo, mi hermano tuvo un choque en una de las etapas y siempre hay que estar atento a cómo están los caminos, que como son rurales siempre pueden haber animales como lo que pasó con la vaca. Al final es harta concentración al mismo tiempo y eso a mi me cuesta un poco.

“El mensaje que intento transmitir, a todas las niñas principalmente, es que los sueños se cumplen”

- ¿Qué siente al ser una de las pocas mujeres dentro de este mundo?

- Al principio me daba un poco de vergüenza, sobre todo cuando andaba en bici o en moto porque te miraban como el bicho raro, pero resulta que siempre he sido ese bicho raro, es algo a lo que estoy acostumbrada y me gusta. El mensaje que intento transmitir, a todas las niñas principalmente, es que nunca escuchen un no como respuesta, si quieres hacer algo es problema tuyo, tienes que darle nomás y cómo me enseñó mi hermano chico, al final los sueños se cumplen y soñar es gratis.

- Pese al cansancio, al hablar lo hace con mucha alegría...

- Es que esto me hace feliz, llego a Santiago llenita, para que te voy a mentir, la adrenalina que uno siente cuando va arriba del auto es como estar en una montaña rusa todo el rato y son años sintiendo lo mismo, es algo que no se te va a pasar. Yo el día que no venga al Rally no sé qué voy a hacer, pero voy a tener que venir igual aunque sea a apoyar a los pilotos (ríe).

- ¿Se siente una inspiración para otras mujeres en el deporte?

- Me gusta transmitir lo que vivo día a día. Previo a cada Rally siempre vamos a algún colegio de cada zona y a mí en lo personal me encanta compartir con niños, entonces sobre todo cuando llegan niñitas interesadas en saber más de todo esto, les abro el auto, las subo, les pongo el casco, hasta les paso la radio para que puedan saber un poquito más de esto. No hay manera que uno no termine contento si al final es gratis hacerlos felices y para ellos es una manera de ver que sí se pueden lograr los sueños. Siempre les digo que no se dejen llevar por otras cosas, lo que te llene el corazón es lo que va a estar bien.