ENTREVISTA AS

“La garra chilena es inigualable”: estuvo en Santiago 2023 y ahora va por los Juegos Olímpicos

La final del lanzamiento de martillo congregó a cuatro Top 10 del ránking mundial. Gabriel Kehr, décimo del escalafón, no logró medalla, pero no se desanima.

El lanzamiento de martillo fue una de las disciplinas que gozó de un mayor nivel de competidores en Santiago 2023. Sólo en la final hubo cuatro Top 10: Ethan Katzberg, número dos y quien se quedó con la medalla de oro; los estadounidenses Rudy Winkler (3°) y Daniel Haugh (8°); y el chileno Gabriel Kehr (10°).

El representante nacional quedó sexto en Santiago 2023 y no consiguió medalla. La situación no le acomoda, puesto que en Lima 2019 fue el mejor de todos y obtuvo la presea dorada para nuestro país. “Venía preparándome bien, era el evento fundamental del año. Quería rendir bien y revalidar la medalla de oro. No se me dieron las cosas”, explica en conversación con AS, en medio de un evento de Nike que lo tuvo a él como protagonista.

- De todos modos, los rivales eran de gran nivel.

- Sí, pero yo me desconcentré un poco. Saco en limpio que, de repente, es bueno que te pasen estas cosas para tener los pies bien puestos en la tierra y pensar en el futuro, y en las cosas que se están haciendo mal. Si mejoramos eso, vamos a llegar mucho más lejos.

- ¿Se imaginó que ese día sábado que compitió habría 40 mil personas en el Estadio Nacional?

- Sabía un poquito, porque se agotaron muy rápido las entradas para ese día sábado. El apoyo de la gente se sintió. Lo he dicho todos los días: yo he estado en estadios llenos, pero la garra chilena es otra cosa. De hecho, hasta los gringos y canadienses se reían porque cuando yo entré al estadio, se mandaron tres C-H-I seguidos (ríe). La garra chilena es inigualable.

- ¿Usted cómo lo vivió?

- Yo disfruté el momento. Cuando salí del túnel a la pista, lo disfruté. Y por lo mismo pensé que iba a andar mucho mejor, porque de verdad lo estaba pasando bien. Y en los entrenamientos me sentía como nunca. Todavía no puedo explicarme qué me pasó. Pero bueno, ya habrá tiempo para eso y ahora unas merecidas vacaciones después de un año tan largo.

- El resultado lo golpeó. ¿Ahora cómo se enfoca en lo próximo?

- Sí, porque venía haciendo las cosas muy bien. Yo creo que fue un tema más mental. Voy a empezar a trabajar en eso. Si quiero sacar una medalla en los Juegos Olímpicos, tengo que estar fuerte de mente. Y también tengo que acostumbrarme a que un estadio lleno te esté gritando a ti. Yo creo que eso me pasó una mala pasada, me desconcentré. Voy a seguir compitiendo, en Europa, con los mejores. Me tengo que acostumbrar a faltarles el respeto.

- ¿Cómo evaluaría la organización de los Juegos Panamericanos?

- Muy bien. He estado en dos Panamericanos y Chile estuvo al nivel. Quizás hubo algunos problemas en temas de organización en el atletismo, pero fueron cosas menores: el disparo de los corredores, la medición mala del lanzamiento de la bala... Pero, en general, estuvieron bien. Lo pasé muy bien. Estuve muy cómodo en la Villa y la comida era excelente.

- ¿Cómo espera que repercuta el éxito de Santiago 2023 en el deporte nacional?

- Lo principal de unos Juegos Panamericanos, yo creo que es la infraestructura que te dejan. La visibilidad que se le da a los deportes. Ahora mucha más gente se enteró que, por ejemplo, yo lanzo el martillo, que fui a unos Juegos Olímpicos. De a poco se va a ir masificando el deporte y la infraestructura es muy nueva, entonces ojalá se le dé un buen uso a todo esto.

- Se dice que en Chile a la gente parece sólo importarle el fútbol, pero hubo dos semanas de estadios llenos en Santiago 2023. ¿Cree que se desmiente esa situación?

- Siempre hay gente que va a hablar demás, pero el interés está. Además, los Juegos Panamericanos no es cualquier evento, es uno muy importante. Así que, qué rico que la gente se haya animado a ver todos los deportes y que nosotros nos sintamos apoyados. En mi caso, bueno, no me fue tan bien y por eso estoy un poco decepcionado, por no haber podido aportar con una medalla, pero lo bonito del deporte es que te da revancha y ahora pienso en París 2024. Y los próximos Panamericanos hay que ganarlos y hay que ganarlos. Ese es el pensamiento.