ENTREVISTA AS

“Mi familia sintió tristeza porque me voy de Chile, pero también orgullo; iré a cumplir un sueño”

“Yo bromeaba y les decía ‘quizás, si fuese más alto estaría en Francia’, pero siempre pensé que tenía el nivel”, dice Diego Escobar en AS.

Diego Escobar hizo historia en el deporte chileno. El rugbista despuntó en el Mundial de Francia 2023, lo que le valió fichar recientemente por Racing 92. Pese a que recién a finales de julio se integrará al plantel, su arribo al Top 14 galo (considerada la mejor liga del mundo de clubes) deja en evidencia el creciente nivel de la disciplina en nuestro país. Escobar se transforma, de este modo, en el cuarto nacional que disputará el prestigioso certamen.

El hooker de 24 años pasa sus últimos días en Chile, en medio de los test matches que disputó el equipo de Los Cóndores ante Hong Kong y Bélgica. Este sábado 20 de julio, la Selección tendrá el reto más grande de todos, en un partido que se anticipa como histórico: será ante Escocia, cuadro del Tier 1, en el Estadio Nacional. “Para nosotros jugar acá es algo mágico, ya que son pocas las ocasiones, sobre todo con rivales de este nivel”, dice Escobar, en diálogo con AS.

- Y se espera que lleguen más de 30 mil personas...

- Claro, que sea en el coliseo del deporte chileno es una carga que nos gusta llevar, porque nos obliga a estar a la altura.

- Las entradas para niños, por ejemplo, están agotadas.

- Para nosotros, que vayan niños, siempre es una motivación extra. Alguna vez, nosotros fuimos esos niños que miraban a Los Cóndores, que los veíamos como ídolos y que aspirábamos a ir a un Mundial. Y si queremos que este deporte siga creciendo, ellos son fundamentales.

- En los próximos días se une a Racing 92 por tres temporadas, un grande del Top 14. ¿Hay ansiedad o nervios antes de un desafío tan grande?

- La verdad es que, en los días libres que hemos tenido, es lo que más se me viene a la cabeza. Pero una vez que ya estamos entrenando y concentrados, sólo puedo pensar en el próximo partido, que es ante Escocia. Quiero tener un buen desempeño.

- Su último equipo fue Selknam, acá en Chile. Ahora deberá emigrar. ¿Cómo fue la reacción de su familia cuando se confirmó el fichaje por Racing 92?

- Fue una mezcla de emociones. Por un lado, hubo tristeza, porque me voy del país, de mi casa y me alejaré de mis seres queridos. Pero, por otro lado, todos saben que iré a cumplir un sueño, no sólo mío, sino de muchos rugbistas, por lo que la emoción y la alegría supera todos los contras que pueda haber.

- Si hace unos años le decían que a sus 24 años ficharía por Racing 92, ¿lo habría creído?

- La verdad es que esto lo hablaba en broma con mi familia. Les decía “quizás, si fuese más alto estaría en Francia” y cosas por el estilo, jajajá, pero siempre tuve la sensación de que tenía el nivel para llegar allá.

- Allá compartirá con figuras mundiales como Siya Kolisi, capitán de Sudáfrica, la selección campeona del mundo. También con el seleccionado francés Gael Fickou y el inglés Owen Farrell. ¿Pudo conocer a algunos en el viaje que efectuó a Francia para fichar por Racing 92?

- No alcancé a compartir mucho con ellos, pero la verdad es que los jugadores de rugby, la mayoría, son súper humildes y acogedores. En algún minuto, todos ellos fueron el jugador joven que está llegando por primera vez a un equipo grande con figuras importantes. Estoy seguro que me van a intentar ayudar en todo.

- Entiendo que ahora está estudiando francés, ¿le ha costado?

- La verdad sí, me ha costado mucho, jajajá. Pero tengo la ilusión de que al llegar allá se me hará más fácil aprender.

- Lo último: se ha hablado mucho sobre transformar al rugby en el segundo deporte colectivo más practicado de Chile, tras el fútbol. Raúl Sigren o Pablo Lemoine, por ejemplo, lo mencionaron. ¿Lo ve posible?

- Yo pienso que es un objetivo ambicioso, pero no alejado de la realidad. No conozco persona que haya entrado al mundo del rugby y no le haya gustado, desde participar como jugador o como fanático. Además, el ambiente y los valores del rugby generan que todas las personas se sientan partícipes.