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REPORTAJE AS

Movistar Arena: el otro lío que se le viene al Ministerio del Deporte

El IND tiene derecho a utilizar el recinto solo tres veces al año. La concesión está cerca de finalizar y las nuevas autoridades tendrán que tomar una decisión.

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Movistar Arena: el otro lío que se le viene al Ministerio del Deporte

Son días movidos en el Ministerio del Deporte. Las autoridades descartaron el uso del Estadio Nacional para el concierto de Metallica por la existencia de “riesgos para la seguridad de las personas” y por “comprometer los trabajos de los Juegos Panamericanos 2023″. En paralelo, aunque con un mayor tiempo de negociación, la cartera que lidera Alexandra Benado tendrá que buscar otra compatibilización entre el deporte y la cultura: el futuro del Arena Santiago ya se discute.

El recinto pertenece al IND y se concesionó en el 2004 a través del Ministerio de Obras Públicas. El periodo finaliza en septiembre del 2024. Pese a que aún queda tiempo, las anteriores autoridades del Mindep alcanzaron a tener conversaciones con el Consorcio Arena Bicentenario. El espacio para la realización de eventos deportivos de federaciones generaba precupación.

Según supo AS, el contrato de concesión estipula que el IND solo puede utilizar el Movistar Arena -sin costo- el 19, 20 y 21 de septiembre de cada año. Una fecha de difícil acceso, si se considera que la Parada Militar se desarrolla en el Parque O’Higgins en ese mismo periodo.

Además, el IND tiene preferencia en otras 12 fechas al año, pero igual debe pagar sumas millonarias. En 2020 se intentó realizar el Preolímpico de voleibol en ese lugar, pero el costo de arriendo superaba el presupuesto. El evento finalmente se desarrolló en el Arena Monticello.

La única vez que se pudo utilizar fue en el Mundial de Karate, que se hizo en septiembre del 2019. El polideportivo del Estadio Nacional estaba ocupado y en el Ministerio del Deporte apostaron por el Arena Santiago. La cita fue un éxito y en la federación quedaron felices, pero el escenario no se volvió a repetir.

El caso de Santiago 2023 en el Movistar Arena

Si la Corporación Santiago 2023 decidiera utilizar el Arena Santiago para los Juegos Panamericanos, el evento deportivo más grande de Chile desde 1962, también tendría que pagar. La competencia será entre octubre y noviembre.

Una de las ideas justamente era realizar la gimnasia en ese recinto. Sin embargo, Panam Sports exige un centro de calentamiento que sea exactamente igual al lugar de la competencia. Ese espacio no existe en el Arena Santiago. La concesionaria propuso construir uno dentro de la negociación para extender el contrato, pero esa condición no se ajustaba a la ley.

El Arena Santiago recibió al karate en 2019.
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El Arena Santiago recibió al karate en 2019.

Las propuestas para el nuevo periodo del Arena Santiago

Las nuevas autoridades tendrán que tomar una decisión y en el camino se visualizan dos vías posibles. Por contrato, el actual acuerdo se puede prolongar por cinco años más y el Mindep tiene la facultad para poner condiciones. La otra opción es iniciar una nueva licitación y ya hay varias productoras que han manifestado su interés.

Ante cualquiera de los dos escenarios, el deporte va a tener un espacio prioritario en la negociación. De acuerdo a información recabada por este medio, los expertos del IND calculan que entre un 15% a 20% del uso anual del Arena Santiago podría ser para actividades deportivas. Ese porcentaje, estiman, provocaría un beneficio para el Team Chile y no dañaría la planificación de las productoras, que necesitan espacio y tiempo para coordinar sus espectáculos.

Las autoridades salientes habían solicitado que entre las condiciones con la concesionaria (a partir del 2024) se deje estipulado que la práctica deportiva corresponda a las federaciones, Comité Olímpico o Comité Paralímpico, y no a exhibiciones que actualmente se realizan.

Una tercera vía, sin licitación y con el IND a cargo del 100% del Arena Santiago, parece poco viable. Esa alternativa, dicen, implicaría una mayor inversión para el Estado y una menor explotación del recinto a nivel cultural. De todas formas, el nuevo Gobierno tendrá que tomar una postura en corto plazo porque ya hay una cuenta regresiva.