ENTREVISTA AS
“Nos conocimos por Tinder hace casi ocho años... Él se siente más chileno que los porotos”
“He visto todo lo que mi ‘negro’ ha sufrido, desde que era guardia hasta ahora, así que es muy lindo que gane una medalla”, dijo.
Yasmani Acosta, el chileno que disputará este martes la final de la lucha grecorromana en los Juegos Olímpicos París 2024, no está solo en el Champ de Mars Arena. Allí, desde que inició su ruta en los octavos de final, el deportista recibió el apoyo de su polola, Rommina Sepúlveda, quien viajó desde Chile a Francia para arengarlo.
Después de la histórica clasificación de Acosta a la final de los Juegos Olímpicos, Sepúlveda conversó con AS Chile: “Me las grité todas, he pasado por distintas emociones. Estoy nerviosa y quiero que mañana (hoy) gane el oro”, aseguró.
- ¿Cómo se gestó la posibilidad de venir?
- Lo planeamos en marzo, pensé ‘¿voy o no voy?’ y él me dijo algo como “sí, tienes que ir porque es un evento importante”. Me organicé y vine. En marzo compré el pasaje, busqué el Airbnb porque no había hospedaje y dejamos todo listo. Llegué el domingo.
- ¿Llevan mucho tiempo juntos?
- Nos conocimos por Tinder hace más de siete años, en octubre vamos a cumplir ocho. Él me fue a conocer a Valparaíso y nunca más nos separamos. Soy porteña.
- ¿O sea usted ha visto todo el esfuerzo de Yasmani?
- He visto todo lo que ha sufrido mi negro, desde que era guardia hasta ahora. Sería muy lindo que ganara la medalla porque él vino a eso. Este es su momento.
- Él va a cumplir nueve años en el país. ¿Ya se siente un chileno más?
- Es más chilenos que los porotos, siempre dice lo mismo.
- ¿Cómo han sido los días de él? ¿Mucho nervio?
- Hablamos en la mañana, lo saludé con un ‘bonjour’ y le dije que le fuera bien. Me dijo que estaba tranquilo porque se había pesado y que iba con todo, pero no yo sabía que me iba a hacer sufrir tanto. Ahora me llamó, dijo que estaba masajeándose.
- ¿Se van a quedar más días en Francia?
- Nos vamos a quedar unos días más porque él vuelve el 12 a Chile, así que regresaremos juntos. Tenemos hartos panoramas con él, pero me adelanté un poco y fui a la Torre (Eiffel), que era mi sueño. Tenía que hacerlo (risas).