Una nueva promesa en el deporte chileno: “Trato de contagiar actitud y valentía”

Este martes 24 de septiembre se inició la disputa del Campeonato de Handball SCA Cadetes - Asunción 2024, en un desafío que no solo busca darle rodaje a la categoría Sub-16 del seleccionado nacional de balonmano a cargo de Matías Salinas, sino que también pretende ser un espacio consagratorio para algunos adolescentes que el año pasado rompieron esquemas tras coronarse en Mendoza por primera vez en la historia de Chile en torneos infantiles a nivel sudamericano.

Justamente dentro de ese grupo de talentosos adolescentes destaca Cristóbal Silva (15), un lateral izquierdo nacional del Club Balonmano Saint Rose.

El joven, que hace unos meses se empinaba como uno de los “grandes protagonistas” en la importante travesía por España, Suecia y Dinamarca realizada por el Club Italiano Balonmano, como destaca su adiestrador Sebastián Fernández, y a la cual fue invitado en búsqueda de mayor roce internacional, no olvida a quien lo descubrió: Roberto Garcés, Jefe del Departamento de Preparación Física de la Federación Chilena de Balonmano.

Esta es la historia de Cristóbal, un diamante en bruto del handball chileno.

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- Hábleme de su posición en la cancha. ¿Dónde y por qué se siente más cómodo? ¿qué característica, a su juicio, lo hace destacar en este sector?

- Lateral izquierdo, esa es mi posición. Mi función es terminar la jugada. Aparte de poder hacer esto último, tengo más oportunidades de meter goles, más que, por ejemplo, el central, que su misión es más de armar el juego. Desde pequeño le agarré cariño, porque sentía que podía entrar con más libertad, que podía atacar.

Me han dicho que soy un jugador muy revulsivo, también me han recalcado que está bien que no tenga miedo a atacar.

- ¿Qué vio en el handball que no encontró en otros deportes?

- El handball es un deporte colectivo, que es algo que igual se puede encontrar en varios otros deportes, pero siento que este, a diferencia de aquellos, concordaba con mis habilidades. Tenía cambios de dirección rápidos, algo que no se utiliza tanto en el fútbol, por ejemplo. Sumado a eso, mi habilidad con los brazos siento que es mucho mayor que con las piernas.

- ¿Qué rescata en lo deportivo y formativo de estos años en su actual elenco, el Club Balonmano Saint Rose? ¿alguien en particular a quien destaque?

- A mi entrenador, Cristian Retamal, quien me enseñó desde cero. Él me enseñó a cómo jugar, las posiciones del juego; gracias a él descubrí la posición de lateral izquierdo, que fue la que me enamoró y, bueno, gracias a él he aprendido varias cosas, como atacar o distintas formas de ataque. A partir de él aprendí casi todo lo que sé.

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- Sus buenas actuaciones han abierto los ojos de varios técnicos de categorías menores en el país. ¿Cómo se siente con esto de estar siendo observado por adiestradores y gente del medio?

- Estoy orgulloso de mí. Estoy orgulloso de todo mi esfuerzo. El esfuerzo que le he dado a este deporte ha valido la pena y la gente lo ha podido ver.

- Hablemos de la Selección Chilena, donde ha sido nominado desde sus inicios en la categoría infantiles, hasta hoy, donde es parte de la categoría cadete. ¿Qué cree que ven los entrenadores en usted? ¿cómo siente que aporta en este ámbito a la ‘Roja’? Quienes lo conocen han mencionado liderazgo, disciplina, actitud, valentía y atrevimiento, entre otras cosas.

- Mi actitud. Siempre trato de ser contagioso con eso. Por ejemplo, nunca rebajarme al rival, tampoco rebajarlo a él, sino que estar siempre en un punto medio, pero donde uno trata de superarlo, trata de ser mejor que el otro. La valentía, también me han dicho eso.

Allá afuera (en su viaje por Europa junto al Club Italiano Balonmano) no me importaba quién viniera, lo marcaba con toda la fuerza y siempre me ha gustado esa forma de verlo. Siempre me ha gustado la competitividad.

Creo que esas características son un gran aporte para la selección, ya que motivo a todos. Trato de motivarlos a todos y que nos motivemos mutuamente, eso es lo mejor que puede pasar en un equipo.

- ¿Se ve como un líder innato cuando juega?

- Dentro de la cancha, siento que cambio mi personalidad. Cambio mi estilo, mis márgenes. Igualmente, trato de tener liderazgo, decirles a los chicos que lo están haciendo bien. Evidentemente, en la selección esto no sucede así, porque sé que los chiquillos saben lo que hacen, pero en mi club, por ejemplo, trato de dar todo lo posible, enseñarles técnicas y trato de motivarlos con la actitud.

- Usted fue campeón sudamericano el año pasado y capitán de Chile en un hecho realmente inédito para este deporte en el país. ¿Cómo se sintió antes, durante y después de conseguido el hito? ¿qué ganancias vio en lo deportivo y formativo para el desarrollo de su carrera al alzar este título?

- Siempre empecé mentalizándome antes de los partidos, algo que no sucedió en 2022 (en su primer campeonato sudamericano a nivel infantil), donde me consumieron los nervios en el primer partido. Claro, después de pensarlo todo el año, fue algo que pude cambiar reflexionando, así después en los partidos entraba con todas las ganas, con toda la garra, siempre teniendo mi tiempo de reflexión antes de cada partido.

Sentí que era un logro grande, un logro que en la categoría infantil nadie ha tenido, y creo que igual ha aportado un poco para cómo ven el deporte los chicos en las categorías menores, porque normalmente estas son las que menos se ven, de juvenil en adelante es lo más fuerte de Chile, pero demostramos que teníamos un nivel alto.

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- ¿Cuáles son sus aspiraciones en el corto y mediano plazo con la Selección Chilena? ¿se ve campeón de algo con la ‘Roja’ en otras categorías o en la adulta?

- Siempre voy a pensar en lo más reciente, que sería ganar este sudamericano (Asunción 2024) y tratar de llegar lo más lejos. Un logro a futuro sería clasificar al Mundial Juvenil y tratar de llevar a Chile lo más lejos posible, por ejemplo, play-offs en Copa A o llevarlo a lo más alto.

Siento que Chile podría ser más fuerte, pero falta coordinación, falta apoyo, es algo que se va ganando con los años.

- Bajo ese mismo marco, ¿cómo ve el nivel del seleccionado nacional para el reto de Paraguay?

- Lo veo muy fuerte. De hecho, hay varios que dicen que la selección del año pasado era de las mejores generaciones, y yo veo que está muy fuerte porque nos veo bastante unidos, principalmente porque nos hemos acompañado en las concentraciones que hemos tenido entre semanas entrenando todos los días, de lunes a sábado, así que nos conocemos perfectamente, tenemos buena química y yo digo que eso es algo fundamental, porque no sirve de nada tener buenos jugadores pero que ni se conozcan. Considero que podemos llegar bastante lejos en este sudamericano.

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- El adiestrador de la selección adulta, Aitor Etxabaru, se encuentra habitualmente pendiente de las selecciones menores. ¿Ha conversado con usted en el pasado o de sus buenas actuaciones hace unas semanas en el viaje que realizó el Club Italiano Balonmano, donde su entrenador lo mencionó como uno de los más destacados de la gira? ¿lo considera una presión extra o lo motiva a seguir esforzándose incluso más?

- He tenido buena comunicación con él. Me conoce, hemos conversado sobre el viaje (a Europa con el Club Italiano Balonmano) y me felicitó. Me ha visto entrenar, me ha dado consejos que han funcionado, como tratar de calmarme un poco en la cancha, no ser tan impulsivo, que fue un problema que tuve a principios de año, como que era muy caballo loco. Cambié esa mentalidad gracias a que él ha conversado conmigo.

Me motiva porque igual es su trabajo ver y aportar a las categorías menores para que en un futuro no tengamos problemas. Lo veo como una motivación y siempre trato de pensar en lo que me habla, lo que me dice.

- ¿Tiene algún ídolo chileno o internacional al cual le gusta seguir o imitar por su estilo de juego?

- Considero como un ídolo, aunque sea zurdo (Silva es diestro), a Mathias Gidsel, que me encanta cómo juega. Tiene una variedad de juegos, como que siempre puede atacar y ataca de diferentes maneras, también siento que es bien revulsivo y que se hace notar en la cancha, se hace notar su presencia y eso es lo que más me gusta.

- Se le ve convencido de seguir este camino. ¿Qué espera en el mediano y largo plazo en lo que respecta a su carrera? ¿le gustaría migrar a Europa?

- En el mediano, podría ser lo que te comenté con la Selección Chilena, llevarla lo más lejos posible en un Mundial Juvenil. Y a largo plazo, estar jugando afuera en algún equipo de Europa, como el Barcelona (España), el PSG (Francia) o el KS Kielce (Polonia).