Viajó desde México para representar a Chile y lo bajaron a última hora: “Me siento pasado a llevar”

Camilo Zapata (22) está triste y lo reconoce varias veces en esta entrevista. El levantador de pesas se encontraba instalado en la Villa Panamericana y ya soñaba con su estreno en Santiago 2023. Este domingo era su gran día: iba a representar al Team Chile en la categoría de 89 kilos en el gimnasio Chimkowe de Peñalolén.

Sin embargo, la historia dio un giro en las últimas horas. Zapata tuvo que abandonar el lugar de concentración y cederle su puesto a Arley Méndez, quien finalmente sí pudo ser inscrito en el megaevento deportivo, tras dejar atrás una sanción por dopaje. El cubano-chileno es la gran carta de la Federación para subirse al podio.

- Este domingo le tocaba competir y en las últimas horas tuvo que cederle su lugar a Arley Méndez. ¿Cómo se siente?

- Siento muchas cosas y, la verdad, no todas son buenas. En el fondo siento tristeza... Me siento pasado a llevar.

- ¿En qué sentido pasado a llevar?

- En el sentido de que nadie me dio una explicación concreta de por qué me sacaron. Todos más o menos sabemos que Arley tiene posibilidades de sacar medalla y todo, pero en el fondo igual me siento pasado a llevar, por todo el trabajo que hay detrás.

- Hábleme de sus sacrificios...

- Tuve que dejar a mi familia, día a día me esfuerzo entrenando y cumplo con disciplina. Todo esto me afecta en el sentido emocional y psicológico, porque no es que yo, de la noche a la mañana, haya dicho ‘ya, voy a ponerme a entrenar para los Panamericanos’. Hace cuatro años participé de los Juegos, siendo juvenil, y ahí dije ‘para los próximos Panamericanos sacaré un mejor resultado. Voy a esforzarme’. Y estar en la villa, instalado, y que de la noche a la mañana te digan ‘te tienes que ir, porque a Arley le levantaron la sanción y hay que darle tu cupo a él’, no sé... Sabía que yo estaba de reserva, pero no me imaginé que estando en la villa me iban a decir eso.

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- ¿Y cómo reaccionó cuando le dijeron que debía irse?

- Bueno, me lo dijeron ayer por la tarde, por teléfono, y la verdad es que me descolocó. No supe cómo reaccionar. A medida que lo iba asimilando, me empezó a dar tristeza. Pensé en todo lo que me había esforzado y sacrificado. El mismo tema de dejar a mi familia, a mi esposa... Hay tristeza e impotencia.

- ¿De qué ciudad venía?

- Yo soy de Temuco, pero vivo en México. Me casé con una mexicana y tenemos una niña. Entonces, tengo que viajar desde allá para poder participar en los eventos.

- ¿Y qué le dijo su familia al respecto?

- Me dijeron ‘eso no se hace. No pensaron en cómo te ibas a sentir como persona. Pensaron más en que era una mejor propuesta para Chile, pero no valoraron tu esfuerzo ni tu sacrificio’.

- Ahora, que lo sacaron de los Panamericanos a última hora, ¿no se replantea sus ganas de seguir defendiendo a Chile?

- Todos me preguntan lo mismo, pero no. Es que, en el fondo, siento que no debo mezclar. Una cosa es cómo se hicieron las cosas, pero mi amor por Chile siempre seguirá. Más que nada, eso fue lo que me dolió, porque yo tenía muchas ganas de representar a Chile lo mejor posible. Estaba en mi país y mucha gente que me conoce sabe que mi carrera deportiva no ha sido fácil, porque no he tenido todos los recursos para poder entrenar de la mejor manera. Entonces, era como sacar todo lo que llevaba guardando hace años. Eso me afecta mucho.

- ¿Qué viene ahora para usted?

- La verdad es que estoy el aire, no me han dicho nada. Voy a replantearme bien lo que haré. Trataré de seguir mejorando en el ámbito deportivo, pero también en el psicológico, porque no estoy contento. Estoy descolocado y no lo he asimilado al 100. Yo creo que hay que dejar pasar el tema de los Juegos, porque donde miro están los Panamericanos. Tengo que replantearme todo y seguir echando ganas.