Suazo, Méndez y la excusa de la adaptación a Europa
Una de las frases más utilizadas por los futbolistas chilenos sin notoriedad en Europa es que no pudieron adaptarse. Que el idioma, que la comida, que los compañeros de allá son muy distintos a los sudamericanos. O que el DT se maneja de otra forma. O que justo cambiaron al entrenador que los llevó.
Pero esas parecen ser sólo unas palabras vacías, principalmente por dos jugadores que hoy triunfan en el Viejo Continente: Gabriel Suazo y Víctor Méndez.
El ex capitán de Colo Colo afrontó un desafío complejo en Francia, con un idioma poco amigable y en lo que era su primera experiencia fuera del país. Pero ahí está brillando. Causó impacto inmediato en el equipo, ya es titular y recibe alabanzas todos los fines de semana.
La Ligue 1 es una liga potente, pero futbolísticamente no ha tenido dificultades. Fue con otra mentalidad y se nota. En Macul tenía todo. Era uno de los más queridos, tenía la jineta de capitán y pudo eternizarse en el club, pero quiso salir de su zona de confort y fracasar no estaba entre sus opciones. Es solo cosa de cabeza. Su fichaje no fue un pedido expreso del DT Philippe Montanier, más bien fue una apuesta del club, y a él le tocó demostrar y ganarse el lugar. Su mentalidad se sobrepuso a todo.
Víctor Méndez es el otro gran ejemplo. Fue a un país aún más difícil. En el CSKA debe lidiar con el idioma ruso y con la amenaza constante de la guerra con Ucrania. Llegó a una liga completamente desconocida y, por si fuera poco, también tuvo que acostumbrarse a las bajas temperaturas y a la nieve. Puros puntos en contra para cualquier otro futbolista nacional que emigra, pero no para él.
El ex Unión siempre quiso partir y ni siquiera soñaba con jugar en Colo Colo, la U o la UC. Él quería más. “Ya estoy en un grande; quiero jugar en Brasil o Argentina”, le dijo a AS en 2020. Hoy está en un equipo gigante de Rusia y ha sido titular en 12 de 19 partidos del torneo local.
El mediocampista ha roto todas las barreras en su primera temporada, mientras varios como Williams Alarcón, Ignacio Jeraldino, Diego Valencia, Pablo Galdames o Tomás Alarcón aún no logran despegar. Y eso que ellos están en países más ‘amigables’ como España o Italia.
Suazo y Méndez han roto con un paradigma. Si la cabeza quiere, la adaptación pasa a ser solo una excusa elegante.