Entrevista AS

“Argentina no puede con la inflación y va a tener para comprar un Mundial...”

En el cierre de Qatar 2022, Jorge Alís muestra su lado futbolero: “Veo llorar a Neymar y me cago de la risa”. Eso sí, también es crítico con la actividad.

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“Argentina no puede con la inflación y va a tener para comprar un Mundial...”

Jorge Alís (55) hace una pausa en su cargada agenda de trabajo y atiende el llamado de AS. El popular comediante argentino, quien está radicado en Chile hace más de dos décadas, disfruta con el fútbol y por ello acepta conversar sobre la participación de la ‘Albiceleste’ en el Mundial de Qatar.

De cara a la final del certamen (este domingo, 12 horas), donde la Argentina de Lionel Messi se medirá con la Francia de Kylian Mbappé, Alís demuestra personalidad: “Yo soy un capricorniano y me gustan los obstáculos”. Sin embargo, el humorista también les envía un mensaje a los detractores del equipo trasandino.

“La gente está hablando muchas boludeces, de que el Mundial está comprado... Argentina no puede comprar ni dólares para parar la inflación, y va a tener para comprar un Mundial”, dice Alís, adelantando el estilo que mantendrá en esta charla.

- ¿Cómo ha vivido los partidos de Argentina en el Mundial? Con harta emoción, ¿no?

- Y... de a poco, porque Argentina entró mal, perdiendo. Ahí uno le baja al perfil y dice ‘bueno, para qué vas a sufrir’. Como que no me enamoro tanto. Y de repente, claro, va creciendo esta onda y pasamos de un estado de ‘¡oh, es una mierda!’ a ‘ser lo más grande’ y ‘Messi es lo más grande que hay’. Es una cosa muy loca el formato de cabeza que tenemos cuando se involucra algo con tanta pasión como el fútbol.

- ¿Y le gusta la forma de jugar de Argentina?

- Sí, pero también he vivido varias finales con la onda de quedarse en el segundo puesto. Es como decía El Chavo: ‘Igual no quería’ (ríe). Ahora, claro, a mí me encanta cómo está jugando Argentina y es bonita esa sensación de decir ‘bueno, vamos a jugar’. Está bárbaro sentir que uno está en la cancha sin estarlo.

- ¿Se imaginaba a Argentina en la final?

- Siempre me imagino a Argentina en la final. Está bueno pensar eso y también está bueno ir empujando de a poco, como pasó con Marruecos... ¿Hace cuánto que los de África vienen peleándola? Siempre era como ‘uy, juegan bien, pero son medios boludos en el final’. Como que se mandaban cagadas pelotudas, sacaban mal y les hacían un gol. Quizás tenía que ver con la experiencia, pero siempre los seres humanos pensamos que podemos llegar a la final.

- ¿Siente que ahora sí se le puede dar a Lionel Messi en un Mundial?

- Pienso ya que se le dio. O sea, con lo que hizo hasta acá... Ya está. El loco va a jugar la final. ¿Qué más se le puede pedir a un flaco de 35 años que pateó la pelotita toda la vida y que ganó Champions, Copa América...? Ahora se caga de la risa, juega y está bárbaro. Todas las personas que están ahí hacen lo que les gusta, más allá de que a muchos les gusta la guita.

- ¿Y cómo vivió la eliminación de Brasil, el gran rival de Argentina en Sudamérica?

- Me pone muy contento que pierda Brasil. Veo llorar a Neymar y me cago de la risa. Eso, en el fútbol, porque si le pasa algo como ser humano trataría de ver cómo lo puedo ayudar. Pero en el fútbol, si pierde, ¡anda a cagar! ¡Me chupa un huevo! Lo de Uruguay sí me dio un poco de cosa, porque en el fondo ellos la pelean, hay mucho huevo y eso llama la atención.

- ¿Cómo ha sido pasar de las burlas por las Copas América perdidas a la satisfacción por conseguir ese torneo y estar en la final de un Mundial?

- No he tenido ninguna transición. Cuando estoy arriba de la historia, lo disfruto como un niño, como cuando estoy mirando el Mundial. Me encanta ver fútbol, mis hijos juegan al fútbol y yo juego con ellos un montón. Pero no soy un fanático de ver fútbol todos los sábado y domingos. Tampoco lo fui en Argentina. Lo era más cuando pendejo. Ahora no le creo tanto a la mentira del fútbol.

- ¿Cómo así?

- Los jugadores se tiran, está el VAR y hay tanta guita. Me gusta más la pichanga... Y lo de las finales perdidas, las viví desde mi trabajo y me pareció precioso, porque los chilenos me hacían mierda y yo me cagaba de la risa con eso. Y después, cuando ganamos la Copa América, me pareció precioso también, ya que es muy lindo que gane tu equipo. Ahora, el Mundial también es precioso, pero bueno, qué sé yo... No se gana nada más que un puto partido de fútbol. Después, la inflación y la salud está como el orto. Si tengo que llevar a mi papá a un médico, a un geriátrico, va a ser la misma mierda al otro día. Y en Francia seguramente va a pasar lo mismo. Todos estos boludos que manejan el mundo, el presidente de Francia, el de Argentina, están ahí tratando de que ganen para que ‘la marraqueta esté más crujiente el lunes’.

- ¿Y el declive de la Roja le genera algo?

- Por supuesto. Me hubiese gustado tener todavía a Marcelo Bielsa en la Selección. Habría sido precioso.

- La última, y saliendo de lo que es el Mundial. ¿Cuál es el equipo que le tira un poco más en Chile? En Instagram se le ha visto apoyando a Ñublense y a Colo Colo...

- Me gusta Ñublense porque son los ‘Diablos Rojos’ y yo soy de Independiente. Entonces, me hace mucho sentido tener mis ‘Diablos Rojos’ en Chile. Y a Colo Colo lo apoyo por mi hijo, que es hincha del club, así que a veces festejo con él.

El próximo evento de Jorge Alís: ‘Quilombo’, en El Cachafaz