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“Dejaría a mi hijo entrar a un reality; yo llevo tres y la madre también trabaja en televisión”

“La relación con Pangal cambió cien por ciento. Antes éramos rivales y enemigos, el reality duró cinco meses y ni nos saludábamos”.

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“Dejaría a mi hijo entrar a un reality; yo llevo tres y la madre también trabaja en televisión”

La noche del domingo se pudo ver en pantalla la salida de Claudio Valdivia en Ganar o Servir. El exfutbolista y actual entrenador, tuvo que dejar el reality de Canal 13 por una lesión en la rodilla, que le impedía participar en las competencias. La decisión golpeó a sus compañeros en el encierro, quienes lo despidieron emocionados. Él, de regreso en Santiago, también acusa el golpe.

- ¿Qué sensación te deja salir antes de lo previsto del reality? ¿Dejas alguna puerta abierta para volver a ver?

- La sensación es mala. Yo pensaba llegar a la final o estar dentro de los semifinalistas porque igual había buenos competidores y yo quería competir con ellos. Con el Coca, con Gonzalo Egas, con mi eterno rival Pangal, con Mateucci, pero bueno, la sensación es negativa. La salida fue antes de lo previsto. ¿Si dejo una puerta abierta para volver?, hoy en día mi prioridad es recuperarme de la lesión. Mi salud es lo más importante, por lo tanto, diría que no.

- ¿Cómo describirías tu relación con Pangal y cuánto cambió en este reality?

- La relación cambió cien por ciento. En Año Cero nosotros éramos rivales y éramos enemigos. Yo estaba en un bando y él era del otro, por lo tanto, éramos enemigos, no hubo un tiempo. El reality duró cinco meses y al tercer, cuarto mes, ni nos saludábamos. Cuando competíamos era de vida o muerte: ganaba él o yo. Pasaron los años, estamos mucho más maduros y el día que nos encontramos en el desierto pensamos en revivir la competencia, pero no la convivencia. Acá nos tocó ser partner, amigos, nos unió más estar en el mismo equipo. Lo quiero mucho. El tiempo lo pasé con él y Austin, es positiva esta amistad. Creo que también se va a mantener afuera.

- ¿Nombra tres personas que rescates de esta experiencia del encierro y por qué?

- Pangal obviamente está entre los tres, pero ya lo conocía. Poeta sorprendió, yo no lo conocía, pero su historia llamó la atención de todos. Es una muy linda persona y creo que el reality a él le sirvió demasiado para sacar un peso que tenía que arrastrar por mucho tiempo. El segundo es Austin, nosotros éramos los tres mosqueteros. Austin es un gran tipo muy educado, buen competidor, muy atractivo, creo que de los que están en la casa es el más guapo de la casa. Y el tercero es Pangal.

- ¿Cuál es tu lugar favorito de la casa en Ganar o Servir y qué es lo más difícil?

- El lugar donde más estuve fue lavando los platos. 14 días seguidos estuve en el sector de los sirvientes y bueno, yo me ofrecía en verdad para lavar, los lavar la losa, entonces eran de las tareas, el lavar era siempre. Porque hacer la cama era una vez, barrera una vez el día, ordenar era una vez el día, pero lavar era tres veces. El lugar favorito es la competencia: yo me sentía bien cuando nos decían ya pónganse la ropa que tenemos que ir a competir. Yo quería competir en todo en las competencias grupales, en la individual, en el círculo del fuego, la competencia era el lugar favorito.

- Y lo más difícil que es todo que te tocó enfrentar.

- Para mí los conflictos, para otros la competencia, para otra no le gustaba la competencia, no? A mí lo que más me costó dentro de la casa. Fue el ver los conflictos que fueron muchos y fuertes

- ¿Dejas que tu hijo vea el reality y qué le dirías si alguna vez te pide entrar a uno?

- Mi hijo convive con la mamá y yo sé que no lo deja ver el reality. Es una decisión que tomamos los dos, por lo tanto, no, no lo ve. Qué es lo que hago yo: a Gaspar le muestro las competencias donde participa papá. Eso sí, lo hago, le muestro cuando va a pasar, me ve correr o tirarme al agua y le gusta eso. Es lo único que yo le permito y le muestro. El conflicto no. El reality es muy tarde. Gaspar a las nueve y hasta las 9 de la noche ya está durmiendo y día siguiente tiene que ir al colegio.

- ¿Y dejarías que entrara a uno?

Sí, por qué no. Yo estuve en tres. A él le gusta el tema de la televisión, por qué no le va a gustar. La mamá trabaja en televisión, el papá participó en un reality, por lo tanto, no sería una decisión difícil, de que nosotros tuviéramos que intervenir. Primero la decisión la toma él, pero sí, claramente dejaría que lo hiciera.

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