Es candidata a Miss Chile y se casó con este vestido semitransparente: “Me atreví”

El sábado Camila Allan, candidata a Miss Chile por el Cajón del Maipo, celebró una “boda simulada” en el centro de eventos KO, en honor al 15 aniversario del centro de eventos. La idea surgió para celebrar su candidatura de manera original, marcando la diferencia con los eventos usuales. Asistieron alrededor de cien personas, incluidos influencers y prensa, con un menú que ofrecía wagyu y opciones vegetarianas. El evento, con temática hippie chic, incluyó sorteos y duró hasta la medianoche.

Pero uno de los detalles que resultó más llamativo fue el vestido semitransparente con el que cruzó el altar, obra de la reconocida diseñadora Celeste Ruiz, que lo confeccionó en menos de dos semanas. El diseño dejaba ver gran parte de la figura de la también candidata a Miss Universo Chile, y durante la ceremonia, causó una tremenda impresión entre los invitados. “Me atreví. Quería que fuera muy pero muy original”.

Ruiz, la diseñadora, dice que el vestido está confeccionado “con un delicado encaje con transparencia, que fue minuciosamente bordado a mano con pedrería en tonos plateados que añaden un brillo sutil y elegante. Las mangas voluminosas de tul complementan perfectamente el estilo romántico del vestido, aportando una sensación etérea. La falda dos cortes recogidos que crean un efecto fluido y ligero, añadiendo mucho movimiento con una sutil transparencia añade un toque de sensualidad”.

Cerca de cien personas asistieron al matrimonio, incluyendo influencers, prensa y el equipo de Allan. El menú consistió en Flat Iron de wagyu con puré rústico al panka, y para los invitados vegetarianos, ravioles de espinaca con salsa pomodoro. La celebración se extendió hasta las ocho de la noche, aunque los últimos invitados se retiraron alrededor de las doce, cuatro horas después del cierre oficial. Durante la fiesta, se sortearon una consulta con el Dr. Joaquín, especialista en estética de las celebridades, y una estancia para dos personas en las cabañas Rustika Lodge en Cajón del Maipo, con tinaja caliente.

“Fue una locura total. Creo que valió la pena todo el esfuerzo. Lo organicé en dos semanas y aunque mucha gente no entendió el concepto de un matrimonio falso, seguí mi instinto y la fiesta fue un éxito. Nunca imaginé vivir algo así.”

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