La deportista que participó en el Miss Universo Chile: “Me sorprendió quedar en el Top 3 de la comuna”
“Lo pasé muy bien. Aprendí muchas cosas de maquillaje, pelo, oratoria y clases de pasarela”, cuenta Eli Campomanes a AS.
Eli Campomanes (33) contesta la llamada de AS Chile con el ánimo que la caracteriza. “Muchas gracias por el interés”, comenta de entrada la multifacética chilena, que es jugadora de pádel, tripulante de cabina y que en los últimos meses decidió incursionar en los concursos de belleza a través del Miss Universo Chile.
Campomanes participó de la primera fase compitiendo en Maipú, donde representando a Ciudad Satélite, quedó en el Top 3 comunal. Si bien no pudo llegar a la competencia nacional, Eli cuenta con emoción lo que vivió en el proceso.
“Mi marido siempre me apaña en todo. Mucha gente le dice ‘¿no te molesta? ¿no te pones celoso?’, pero él me conoció siendo promotora y con las sesiones de fotos o cosas así, entonces sería un poco contraproducente que le molestara", comienza diciendo sobre el momento en el que surgió la actividad.
- ¿Qué recuerdos tiene del inicio de esto?
- Todo partió el año pasado cuando me invitaron a participar del Miss Mundo. Me mandaron el acuerdo y cuando lo leí, me di cuenta que no podía participar porque ese concurso tenía restricciones. No podías estar casada y tenías que ser menor de 28 años... Yo no cumplía ninguno de los dos (ríe). Después me contactó el coordinador del Miss Universo Chile, pero casi todos los castings de las comunas fueron en marzo y yo estaba de viaje. Pero en Maipú estaba abierto aún y fui a la entrevista con un jetlag tremendo (ríe).
- ¿Y cómo siguió el tema?
- Pasé la entrevista y quedé en Maipú, donde cada candidata representaba un sector de la comuna. En este concurso no es necesario vivir en la comuna, por eso yo pude competir ahí.
- ¿Qué cosas fueron las que más le gustaron de esta experiencia?
- Siento que ha habido un avance en dejar los estereotipos de lado y que cualquier mujer pueda participar de algo así y le permites vivir la experiencia. Lo pasé muy bien, aprendí muchas cosas de maquillaje, pelo, oratoria, clases de pasarela...
- El modelaje no era algo nuevo en su vida...
- Había hecho cosas con sesiones de fotos o siendo rostro de marcas chiquititas, pero esto era completamente distinto.
- ¿En qué sentido?
- El cómo caminar por ejemplo o pararte en el escenario, desfilar en bikini, que me daba mucha vergüenza (ríe) o las distintas actividades que hay que hacer. Siempre fui vergonzosa con los escenarios, en el colegio me costaba disertar (ríe). También quise ser actriz, pero mi vergüenza me ganó...
- ¿Cómo?
- Cuando hice la práctica en un colegio, una alumna que ya actuaba me dio el dato para un casting. Mandé un correo, me enviaron el guion para un bolo, que es un mini-personaje que habla. Salí de la U, me subí al auto, pero estaba tan nerviosa, que no fui (ríe). Abandoné uno de los sueños de mi vida por mi vergüenza.
- ¿Quedó conforme con el resultado? Fue Top 3 de la comuna...
- Es curioso, porque yo sentía que podía haber ganado, pero sí me sorprendió quedar en el Top 3 (ríe). Pero siempre creí que la chica que ganó, iba a hacerlo, entonces es como que me lo esperaba o lo intuía. No me sentí decepcionada.
- ¿Le gustaría repetir la experiencia?
- Desde que empecé hasta que salí, pensaba que era esto y nada más. Pero lo que sí me sorprendió es que me quedó gustando la onda, lo que se vive. Para mí es como un personaje, porque si me conoces por fuera yo siempre ando en buzo o ropa deportiva y me maquillo para carretear no más (ríe). En el día a día no me hago nada, entonces era un desafío estar todo el tiempo perfecta, entre comillas. No sé si es factible ganar la corona, pero me gustaría vivir la parte que no pude de la experiencia.