“Sufrí abusos cuando niño; jamás lo comenté hasta que tuve 40 años, cuando lo supo mi mamá”

Luky Buzzio (50) fue una de las figuras más reconocidas del recordado show “Morandé con Compañía”. El actor cómico y personal trainer, reside actualmente en Estados Unidos, donde hace tres meses realiza un podcast donde relata su vida, y repasó un secreto que mantuvo por casi 45 años, había sido abusado sexualmente durante su niñez.

“Sucedió con un supuesto primo, cuando visitábamos a la familia, él nos llevaba a jugar debajo de la cama y hacía sus malabares nefastos contra nosotros, Tenía cinco años, y mi hermano mayor era cuatro años mayor”, relató.

En conversación con LUN, Buzzio profundizó esta confesión, y explicó que lo llevó a hacerla: “No lo hice realmente para resolver algo, o para decir ay, me violó un primo del campo hace muchos años. Lo hice para que otros vean cómo hay que sacar la pena, que se animen a hacerlo”.

“Estos recuerdos los he llevado siempre inconscientemente. Este episodio de vida me marcó, porque me hizo una persona insegura toda mi adolescencia (...) el cerebro va madurando y entendiendo lo que él me hacía. A los cinco años no tienes noción de dónde estás parado, creces y entiendes que no era un juego”, agregó.

Sobre su victimario, el actor cómico contó que luego de la muerte de sus abuelos, jamás volvió a tener contacto con él.

La vida de Buzzio luego de su abuso sexual

Al ser consultado si acudió a algún tipo de terapia, contestó: “No, jamás. Lo superé, seguí avanzando y no me quedé atrapado en esa habitación oscura. Me pasó si que no pude disfrutar tanto a mis hijas cuando chicas. No las podía ver desnudas, como hacen la mayoría de padres, me sentía contra una pared”.

Sobre cómo logro superar su trauma, Buzzio contó que se inspiró en la historia del actor Arnold Schwarzenegger, buscando “convertirse en alguien fuerte e invencible”.

“Esto no lo sabían mis hijas, ahora se van a enterar. Jamás lo comenté hasta que tuve 40 años, cuando lo supo mi mamá. Me enteré que mi hermana no había hablado con ella, porque no le salían las palabras. Ya está, ya pasó”, cerró.