ENTREVISTA AS
“En la UC somos todos grandes y profesionales, nadie vendrá de afuera a ayudarnos”
Branco Ampuero recibió a AS Chile para analizar el complejo presente de los cruzados. “Los jugadores no estamos al ciento por ciento”, confesó.
Branco Ampuero ha sido uno de los futbolistas más regulares en el complejo presente de Universidad Católica. Su nivel le ha valido firmar un importante contrato con Under Armour, para convertirse en rostro de la marca. A partir de ahora, el zaguero utilizará el modelo UA Shadow Elite 2 FG, zapatos que tienen como característica principal, ser muy ágiles gracias a la suela exterior de fibra de carbono con tacos colocados que ayuda a que los cambios de dirección y frenos sean más rápidos.
“Feliz porque una marca prestigiosa como Under Armour se fije en mí. Me llena de orgullo por el simple hecho de firmar un contrato, es algo que te hace sentir importante. Por coincidencias de la vida vuelvo a usar zapatos de la marca, hace muchos años usé unos y estoy feliz de estar con ellos. Lo que más me motivó fue la importancia y la calidad que le dieron al acuerdo. Sin duda los zapatos van a pegar en Chile, he visto a varios futbolistas usándolos”, cuenta Ampuero a AS Chile, en el inicio de la conversación que se desarrolla en la tienda de la marca en el Mall Costanera Center.
En la instancia, Ampuero recibe a AS para hablar extensamente del complejo momento de la UC, que ya quedó sin competencia internacional y que empezó de mala forma el Campeonato Nacional. El zaguero no esquiva ninguna pregunta. De hecho, sus reflexiones son bastante profundas, sin temor a contestar nada.
- ¿Cómo está llevando este complejo momento de Católica? Usted ha sido multicampeón en el club, pero la actualidad está siendo muy difícil...
- Creo que son procesos que se viven en el deporte, independiente de cuál sea la rama. Uno se tiene que ir reinventando siempre y con respecto a eso, Católica estos últimos dos años ha tenido una transición que no ha sido buena por muchos factores como infraestructura, estado de cancha, salida de entrenadores y jugadores. Es un club que no está acostumbrado a eso. Pero creo que lo que más pegó últimamente fue la eliminación de la Sudamericana.
- ¿Afectó mucho el hecho de no poder jugar en San Carlos de Apoquindo?
- Sin duda. En el fútbol creo que se manejan mucho los porcentajes y en los últimos años, Católica era un equipo totalmente superior y perdió muy pocas veces en San Carlos. Moverte de una cancha es especial en el sentido de que a veces no encontramos las mejores condiciones y puede ser que empiece una negatividad en cuanto al estado de los campos. Se crea un clima que creo que no es bueno, pero lo concreto es que sabemos que no tendremos disponible San Carlos este año y lo tenemos que asimilar como tal, para a partir de ahí comenzar a sumar y ganar partidos.
- Justamente están siendo locales en un estadio que tiene muchos partidos extra, lo que genera que no exista exclusividad para ustedes. ¿Cómo hacen para abstraerse de pensar en el estado del campo de juego?
- Mentalmente creo que es súper relevante dar por hecho algunas cosas, como por ejemplo, que San Carlos no lo vamos a tener este año. Independiente de cómo esté la cancha de Santa Laura, vamos a tener que hacer de locales ahí y tenemos que buscar la manera de solucionarlo. Es una cancha que lamentablemente la han ocupado muchos equipos, pero tengo entendido que hay un contrato de por medio y nosotros ante eso tenemos que echar ganas, ir para adelante y sacar puntos. Futbolísticamente, vamos a ir mejorando, pero lo que más anhelamos ahora es ganar puntos.
- Antes hablaba del golpe que significó la eliminación de la Copa Sudamericana. ¿Qué tan duro fue?
- Fuerte, sin duda, porque era uno de los objetivos del año. No el principal, pero por cómo uno se puede valorizar como jugador en una Copa Sudamericana o Copa Libertadores, son experiencias que te llenan de orgullo. Jugar en otro país, competir, terminar representando al fútbol chileno más allá del equipo... no se cumplió esa meta, estábamos muy dolidos y creo que es el reflejo de lo que se vio con Everton, que nos siguió pegando. Somos nosotros los que tenemos dar vuelta la situación, somos todos grandes y profesionales, nadie vendrá de afuera a ayudarnos.
- ¿Y la salida de Nicolás Núñez? Compañeros suyos lo despidieron lamentando no haber podido revertir la situación...
- No es algo agradable. Creo que recién a mis 30 años me estoy dando cuenta de esas cosas. Por ahí, cuando uno es más chico y se va un entrenador, no le da tanta importancia, pero pensando en Nicolás es fuerte, porque es un entrenador que estaba muy ilusionado, era un jugador de casa, salió del club, pero siempre en estos casos hay responsabilidades compartidas. En ningún caso se la lleva toda el ‘Nico’. Los jugadores no estuvimos ni estamos al ciento por ciento futbolísticamente y cuando hay rendimientos individuales o grupales que no están a tope, pasan estas cosas.
- Los candidatos más importantes que suenan hoy son Gabriel Milito y Rodolfo Arruabarrena. ¿Qué opinión le merecen esas opciones por más que usted no haya trabajado con ellos?
- En esas decisiones bien poco puedo hacer, conozco a los que mencionaste, pero es una decisión que toman entre Juan (Tagle), ‘Tati’ (Buljubasich), que son los encargados. Nosotros como jugadores estamos a disposición para trabajar el doble y el triple para que puedan llegar los resultados positivos que es lo que todos esperamos.
- Le pregunto por el futuro. ¿Cómo se visualiza en diciembre de 2024?
- Me veo siendo importante en Católica, manteniendo mi nivel, haciendo buenos partidos y espero perderme muy pocos partidos también. Y en lo grupal, pelear cosas importantes. Todos tenemos la misma ambición de volver a salir campeón, pero lo más importante es el camino que podamos recorrer para llegar a esos objetivos .y creo que hay una buena materia prima. Si bien el arranque no ha sido bueno, esto va a mejorar.