Cobresal 3 - Barnechea 2
Temple minero: Cobresal logra el título con un final de película
Los mineros sufrieron para vencer a Barnechea. La UC empató con Iquique tras ir ganando 3-0. En 35 años de historia, los albinaranjas son campeones por primera vez.
Tuvieron que pasar 35 años para que Cobresal gritara campeón por primera vez. Largo tiempo en que los mineros convivieron más veces con los descensos que con las luchas por el campeonato. Eso hasta hoy, cuando un puñado de jugadores, dirigidos por un trabajólico Dalcio Giovagnoli, escribió el mejor guión de la historia cobresalina.
A los mineros se les notó nerviosos en el inicio del partido. Los 11 jugadores parecieron sentir el peso de los 35 años de historia de una institución que nunca había ganado un título. Los nortinos tuvieron que salir a buscar el partido. Y se notó el cambio de libreto.
El dueño de casa pareció reaccionar con el empate transitorio de Ever Cantero, a los 28', pero cuatro minutos más tarde Joaquín Moya puso nuevamente en ventaja a los huaicocheros. A esa altura, la UC parecía haber conectado el golpe de nocaut con el 3-0 ante Iquique. A Cobresal se le ponía todo cuesta arriba.
La charla del entretiempo pareció darle resultado a Cobresal. En Santiago, a la distancia, los Dragones Celestes se contagiaron con el entusiasmo. A los 66 minutos el panorama cambió: Francisco Sánchez consiguió el empate para los mineros e Iquique, en menos de media hora, igualó 3-3 contra los cruzados. Las emociones se vivían en una y otra cancha, pese a los mil kilómetros de distancia.
Los albinaranjas querían el título en su casa, ante su gente, la misma que sufrió por el rigor de la naturaleza. Fueron por el partido en una definición de campeonato que fue escrita por el mejor de los guionistas.
A los 80', en ambos partidos se cobraron penales casi simultáneamente. Para la UC pateó Darío Botinelli y el portero iquiqueño Bryan Cortés, quien se había comido el primer gol de los cruzados, tuvo una extraordinaria reacción para desviar el remate. En el estadio El Cobre, Matías Donoso, uno de los mejores de la campaña minera, asumió la responsabilidad, se vistió de héroe y decretó el 3-2 para los nortinos. Gol que valía un campeonato. Los dos últimos penales de los mineros habían sido desperdiciados.
Los minutos finales fueron de infarto. Los dueños de casa aguantaron el resultado. John Santander paralizó al campamento minero cuando estrelló un tiro en el palo. La UC intentaba un gol que alargara la lucha hasta la última jornada. Al final, los cruzados no pudieron y Cobresal se quedó con la corona.
Fuerza y temple minero rezan los fieles hinchas de Cobresal. Misma fuerza y mismo temple con la que hoy un grupo de jugadores le dio a la institución el primer título de su historia. Fue una película épica, dura y trabajada. Y que tuvo un final feliz.