Palestino hace historia y avanza en la Sudamericana

Palestino entró suelto de cuerpo a la cancha de La Vitoria. Era el otro, Flamengo, ese coloso continental, el que tenía el deber de sellar la llave en casa (prestada). El 1 a 0 conseguido en el Estadio Monumental le daba la ventaja a los rojinegros para avanzar a la ronda de los 8 mejores de la Copa Sudamericana. 

Los árabes se apoyaron en ese tridente ofensivo liderado por Leonardo Valencia para dañar de mitad hacia arriba. Palestino se hizo dueño de la pelota y eso hizo poner ansioso a Flamengo. Con desparpajo el equipo chileno se aproximó al pórtico de Alex Muralha con remates de media distancia que anunciaban lo que estaba por llegar.

El minuto 33 fue el de la gloria. Valencia sirvió con perfección un tiro libre que dio en el poste y encontró a Roberto Cereceda en el área chica para empujarla al fondo del arco. 

Mazurek, Torres y Valencia siguieron manejando los hilos de los árabes. Mientras, Farías y Carvajal afirmaban la estantería en el medio del campo. Valencia terminó de confirmar su buen momento al fin del primer tiempo. Sacó un zapatazo desde fuera del área que dejó fuera de acción a Muralha. Así, Palestino se fue a descansar. Clasificado.

Si Valencia se graduó de figura el primer tiempo, Ignacio González le disputó el cetro en la segunda parte. El arquero formado en Colo Colo cortó un centro de Chiquinho, le interceptó un remate bajo a Emerson Sheik y tuvo en Benjamín Vidal a su mejor aliado. El ex defensor azul paró en seco a Paolo Guerrero. 

Sin embargo, el instante negro de Valencia llegó. El mejor de la cancha se equivocó en la marca dentro del área y bajó al delantero peruano. El penal lo sirvió Alan Patrick. González le adivinó el lado, pero eso no fue suficiente para evitar el descuento. 

Palestino retomó el control del mediocampo tras el gol. Intentó con jugadas urdidas buscar permanentemente a Benegas por aire. El argentino sufrió un mal cobro en posición de juego y exigió a Muralha con un disparo abajo. 

Los minutos quemaban en las tribunas, mientras Palestino buscaba manejar ese nerviosismo a su favor. A cinco del final, Valencia pudo asegurar la llave. Recibió de taco una habilitación de Cereceda, pero su remate chocó en el palo izquierdo de Muralha. Mazurek también tuvo su opción, pero la pelota se fue afuera. 

Los descuentos parecieron eternos. Los brazos arriba de Diego Haro desataron la locura del pueblo árabe. La quimera se alcanzó, Palestino rompió la historia en Brasil. Es uno de los ocho mejores equipos del continente.