Con incidentes aislados culmina "Banderazo" de la U

Como en cada previa de un choque ante Colo Colo o la UC, los hinchas de Universidad de Chile llegaron hasta el lugar de entrenamiento de su club para entregar el último apoyo al plantel antes del duelo de mañana en el Estadio Monumental. Era todo normal hasta el final del "Banderazo".

Y fueron cerca de 2.500 hinchas del Romántico Viajero los que llegaron hasta las dependencias del Centro Deportivo Azul para aguardar la salida de sus jugadores a bordo del bus que los trasladaría hasta el hotel de concentración.

Al contrario de lo que ocurre con el Cacique, la dirigencia universitaria no permite el ingreso de sus fanáticos, por lo que el "banderazo", al igual que años anteriores, tuvo que realizarse en la calle.

Los forofos azules se tomaron Avenida El Parrón, por lo que Carabineros tuvo que desviar el tránsito para ayudar el desplazamiento de los vehículos.

Cerca de las 11:45 se abrió el portón del CDA, y fue ahí cuando terminó de desatarse la fiesta: el bus avanzaba lentamente, los hinchas prendieron bengalas, tiraron papel picado, tocaron con más fuerza el bombo y prosiguieron con los cánticos a favor de sus jugadores.

La nota negra de la jornada se vivió a eso de las 12:40 horas, cuando Carabineros disolvió el "banderazo" y comenzaron a caer proyectiles y botellas lanzadas por algunos hinchas. De inmediato actuaron las patrullas de las comisarias de San Ramón y La Cisterna, además del carro lanza aguas.

Fue breve eso sí. Sólo hubo alguna inquietud mayor de las madres que llevaron niños muy chicos, que se refugiaron junto al portón de acceso al CDA. En 5 minutos ya todo había vuelto a la normalidad.