Locas movidas de verano

Habitualmente era enero el mes donde se hablaba de los fichajes, rumores, transferencias, conversaciones, cláusulas de salida, grúas europeas, hombres del maletín, etc. El cambio del torneo local al formato europeo hizo que las dos últimas semanas de diciembre fueran entretenidamente agitadas.

Colo Colo remeció no sólo a Chile, si no que también a México, con la repatriación de Humberto Suazo. La comarca regiomontana llora la partida de Chupete y acá en Santiago, con tanta lágrima de los seguidores rayados, recién valoran todo lo que hizo el sanantonino en Monterrey.

Chupete promete una dupla de oro en ataque con Esteban Paredes quien, por el bien del espectáculo y de los colocolinos, ojalá esté al ciento por ciento desde el 10 de enero próximo.

Pero así como consiguen refuerzos de lujo, los albos pueden perder en la pasada. A la oferta del Cosmos por Pajarito Valdés se suma otra desde México, por más de cuatro millones de dólares, por Emiliano Vecchio. O sea, se pasan de tontos si no lo venden. Pero Héctor Tapia lo quiere. Nubes negras en el horizonte albo.

En la U trajeron a Leandro Benegas, el tanque calerano especialista en darles dolores de cabeza a los defensores rivales. Eso y no mucho más. Un arquero suplente chileno que reemplace a Luis Marín. Ya se les cayó el promisorio y talentoso porteño Castellón. ¿Nery Veloso, Miguel Jiménez, David Reyes?

Huachipato se convirtió en el protagonista de esta fiebre de verano. Perdieron al entrenador Mario Salas y quedaron enojados con la UC, porque creen que estuvieron hablando con el Comandante antes de lo que la prudencia sugiere. Los cruzados quieren a Martín Rodríguez y a Andrés Vilches, pero el no que les respondieron en Las Higueras se escuchó hasta en Chillán.

Martín Rodríguez es objeto de deseo de albos y azules. En la usina quieren dos millones de dólares por él. Quien las pague, se lo lleva. Otra disputa, tanto o más luchada que la del último torneo.