La sangre charrúa se tomó el camarín de los azules

La llegada de Martín Lasarte cambió los aires en Universidad de Chile. También trajo consigo sangre nueva. La charrúa. Esa que en todas partes del mundo identifican y enaltecen.

Partiendo por el propio cuerpo técnico, compuesto casi íntegramente por uruguayos. El propio entrenador, además de su ayudante Rodolfo Neme y el preparador físico Marcelo Tulbovitz provienen de Uruguay.

Son los propios valores azules quienes destacan que lo motivacional es un aspecto fundamental en su trabajo. “Los tres ‘profes’ son muy buenos para eso”, señala un jugador. “Hacen que nos creamos el cuento, que no hay rival imposible”, agrega otro.

Por eso se entiende que Machete haya querido contagiar al camarín apenas llegó y ahí sugirió la contratación de su compatriota Mathías Corujo, quien rápidamente comenzó a convertir goles, se ganó el puesto y el cariño del grupo.

Tres semanas después del arribo del lateral se sumó el volante Guzmán Pereira, pedido expresamente por el DT. Al mediocampista le costó al principio, pero luego se afirmó y en la interna es uno de los más ‘desordenados’.

Durante el primer semestre se les vio muchas veces juntos, trasladándose a entrenamientos y concentraciones en el mismo vehículo. Sus familias también se hicieron cercanas.

El resto del plantel nota la presencia de los uruguayos. “Este equipo tiene la base del 2011 y suma incorporaciones positivas, como es la sangre uruguaya, que han sido pilares fundamentales”, explicaba Johnny Herrera a radio ADN.

Es cierto. Todos notan el empuje de los uruguayos. Cada cierto tiempo es habitual ver a Pereira subiendo mensajes en las redes sociales con el clásico “vamo arriba” de los charrúas.

Y por si fuera poco, este semestre se les sumó otro abanderado. Maxi Rodríguez estuvo a un paso de llegar a mediados de 2014 a la U, pero finalmente lo hizo este semestre.

A él lo conocían y lo acogieron inmediatamente. Lo mueven de allá para acá y le intentan hacer más fácil la vida en Santiago. A los tres se les ve muy compenetrados en el CDA.

Ellos intentarán, con el empuje que caracteriza a los uruguayos, ayudar al equipo a conquistar el bicampeonato y hacer historia en la Copa Libertadores.