U. Católica | Cristián Álvarez
“Estaba sangrando mucho, el doctor se asustó y me sacó”
De alta tras su hospitalización por un golpe en la vejiga que comprometió la uretra, el capitán de los cruzados reconoció que "yo también me asusté un poco”.
En su intento por bloquear el tiro de Leonardo Valencia, que significó la apertura de la cuenta para Palestino en el triunfo de la UC sobre Palestino en San Carlos de Apoquindo, Walter Ibáñez el propinó un tremendo golpe a Cristián Álvarez en la zona baja del abdomen.
¿Resultado? El capitán de los cruzados tuvo que dejar la cancha, a causa de una contusión en la vejiga que también le comprometió la uretra y debió pasar una noche internado en un clínica para tratar la afección.
“Tengo bastante tolerancia al dolor, me concentro en lo que estoy haciendo y el dolor se verá después. En este caso, me sacó el doctor, no salí yo. Estaba sangrando mucho; entonces el doctor se asustó y me sacó”, explicó el defensor en El Mercurio.
“Yo también me asusté un poco, porque no es normal estar sangrando en esa zona. Me tuve que cambiar los calzoncillos en el entretiempo, estaban todos rojos”, agregó Álvarez, quien en 2012 debió ser operado de un testículo, debido a una patada de un rival durante un partido.
“Hay que estar preparado para que sucedan estas cosas, son parte de lo que somos en realidad, de lo que jugamos. Siempre está la posibilidad de que ocurran cosas así”, comentó el zaguero.
A pesar del percance, el capitán de la UC quedó muy conforme con la victoria ante los árabes y el avance que, a su juicio, ha logrado el equipo que dirige Mario Salas.
“Hemos ido evolucionando con los partidos. Salvo frente a Wanderers, en todos hemos ido mejorando en llegadas al arco, tenencia de la pelota, el ordenamiento en la defensa. Se nota un avance fecha a fecha”, sostuvo Álvarez, quien será evaluado durante esta semana para constatar su recuperación y así jugar contra O’Higgins, este domingo, en Rancagua.