Champions League
Arsenal hipoteca sus chances con caída ante Mónaco
Pese a los intentos de Alexis Sánchez en su partido 500, los 'gunners' tienen un pie fuera de Champions tras perder 3-1 en Londres.
Partido para el olvido de Arsenal en el Emirates ante el rival que todos querían enfrentar. Mónaco aparecía como el más accesible de octavos de final, pero los ingleses no pudieron superar al cuadro galo, que regresa al Principado con un 3-1 que tiene en la cuerda floja a los 'gunners'.
El ímpetu de los locales duró los primeros 10 minutos. De ahí en más, el equipo de Arsene Wenger no tuvo las ideas y ni la intensidad para romper a la defensa monegasca, que jamás perdió el orden.
Alexis Sánchez luchó y mucho instalado por izquierda, pero el juego predecible de sus compañeros le pasó la cuenta. Olivier Giroud aguantó a los centrales, pero no estuvo certero frente al arco. Y eso lo pagó el equipo.
Mónaco fue certero en la contras, paciente, y tuvo premio a los 37'. Geoffrey Kondogbia llegó a la entrada del área, tuvo tiempo para acomodarse y su disparo se desvió en Mertesacker descolocando a David Ospina. Silencio en el Emirates.
Silencio que se trasladó al equipo en la cancha. Salvo intentos individuales, la mayoría de Alexis Sánchez, Arsenal no tuvo la dinámica para quebrar las marcas de Mónaco, que con tranquilidad y una salida explosiva llegó al segundo.
Sánchez pierde un balón en área de los franceses y pese a su intento por recuperar, Kondogbia conduce hasta mitad de cancha, aguanta la marca de cinco rivales y encuentra habilitado a Martial, que con campo y tiempo avanza y le cede el balón a Dimitar Berbatov, que se sacó las pifias de la noche con un golazo (53').
De ahí en más fue chocar y chocar para los 'gunners', incluyendo cosas increíbles como que Walcott desde el suelo evitó el descuento de Welbeck. Se alcanzó a ilusionar con el descuento de Oxlade-Chamberlain (90+1'), pero el ingresado en el complemento también fue cómplice en el tercero de Monaco, obra de Yannick Ferreira-Carrasco (90+3').
Alexis Sánchez celebró de la peor manera su partido 500 como profesional. La derrota 3-1 deja al Arsenal con un pie fuera de la Champions, ya que para soñar deberá ganar por tres goles de diferencia.