Hernández
La hora de Henríquez
Ligerito viene la oficialización de la nómina de los 30 preseleccionados de Sampaoli para la Copa América y desde Croacia, primero el director deportivo del Dinamo de Zagreb, Zoran Mamic y luego el propio Angelo Henríquez confirmaron que estaba en el listado.
No sorprende. Por varias razones. La primera y más contundente, el estupendo presente del delantero en la liga croata donde es el máximo artillero con 27 goles. Henríquez llegó desde el Manchester United con la misión de ganar experiencia dentro de Europa, jugar partidos, sentirse importante y hacer goles. Y vaya si lo ha logrado, objetivo cumplido por donde se le mire.
Dirán aquellos críticos que nunca tienen en vista el contexto y los antecedentes que realmente cuentan que la liga croata es una competencia de segundo orden en el viejo mundo y el mérito de ser goleador ahí pierde valor. Ok, Croacia no es España, Alemania, Inglaterra, Italia o Francia. También puede que esté por debajo de Holanda y Suiza. Pero sigue siendo Europa y Henríquez que, no dejo de mencionar el dato porque es relevante, recién cumplió 21 años y lleva casi 30 goles esta temporada. Lo suyo, simplemente, es un campañón.
Las anotaciones de Henríquez han sido para todos los gustos. De cabeza, media distancia, acrobáticas, de contragolpe o acompañando la jugada con olfato goleador como la de este fin de semana en el empate del Dinamo ante el NK Zagreb. Sólo en Croacia este año, Henríquez ha hecho más goles que en su paso por Universidad de Chile, Zaragoza, Wigan y Manchester United juntos.
¿Acaso hubiera sido mejor que permaneciera en el United? Imposible porque Van Gaal después de un tiempo a prueba decidió no incorporarlo al plantel y enviarlo a préstamo. De hecho, medios ingleses informaron de una posible venta de Henríquez al Dinamo de Zagreb en menos de dos millones de dólares. Por lo demás, si se hubiese quedado en Inglaterra nada garantizaba que hubiese tenido continuidad. Si por el préstamo de Radamel Falcao García al Mónaco el Manchester United pagó ocho millones de dólares y el Tigre no respondió (hizo su último gol el 31 de enero) y tuvo que ver muchos partidos desde el banco, pensar que Henríquez iba a sumar minutos en los Diablos Rojos era irreal.
Volviendo a los méritos de Henríquez para estar en la Copa América, sí en la lista final, no solo en la nómina preliminar, los argumentos abundan. Su consolidación en la liga croata, que debe ser la plataforma para saltar a un fútbol más competitivo en el corto o mediano plazo, es la razón principal pero las que siguen son evidentes. Esteban Paredes quedó fuera por lesión, Gustavo Canales tuvo una discreta temporada y él mismo considera que hay otros jugadores que están por delante de él, Nicolás Castillo se lesionó de mediana gravedad y, al momento de lastimarse de la rodilla tampoco tenía continuidad en Alemania.
En términos concretos, Henríquez compite con Pinilla y pare de contar. Alexis es figura excluyente. Vargas, pese a que está recuperándose de una lesión y tuvo una mala temporada en el QPR, es número puesto. Fabián Orellana y Pedro Pablo Hernández tienen otras características. No hay más donde echar mano.
El equipo lo arma Sampaoli y el resto, incluida esta columna, es música. Pero también es cierto que a la Roja le falta gol, necesita más alternativas y no depender de Alexis, Vargas o Vidal. Henríquez viene con la confianza a tope y dadas las actuales circunstancias debería tener cabida en la nómina definitiva. Veremos qué decide el cuerpo técnico de la Roja.