"Prefiero a Paulo Garcés por sobre Johnny Herrera"

El nombre de Víctor Loyola quedó inmortalizado en la historia del fútbol chileno el 25 de noviembre de 2009. Ese día, el portero ingresó, luego de insistirle en reiteradas ocasiones a su técnico Juan Antonio Pizzi, como delantero y a los pocos segundos anotó el gol que metió a Santiago Morning en las semifinales del torneo nacional. ¿Su colega que recibió el tanto con la camiseta de Audax Italiano? Un tal Johnny Herrera. Después de ese vendrían cuatro tantos más en el profesionalismo.

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Así nació la historia del "arquero-goleador", hoy retirado hace más de dos años. "No pensaba retirarme, pero tenía un problema a la columna que me tenía con lesiones y más lesiones. Me tenía bien cansado eso y sumado a problemas que tuve con dirigentes de Santiago Morning, decidí dar un paso al costado, pero siempre pensando en volver a jugar. Y me ofrecieron volver a jugar tiempo después, pero no valía la pena ni económicamente ni familiarmente", confiesa.

Hoy, Loyola está cargo del fútbol formativo del Colegio Palmarés Oriente de Quilicura. Además, tiene una escuela de arqueros junto a Carlos Torres, ex meta de la Rojita en el Mundial Sub 17 de 1993 y actual preparador de arqueros del primer equipo del "Chaguito".

"Es una experiencia enriquecedora. Hemos enviado niños a probarse a algunos equipos, como Colo Colo y Universidad de Chile. Yo soy feliz cuando ellos son felices", explica.

¿Qué fue lo mejor que le dejó el fútbol?

-La gente que conocí, varios amigos, la experiencia de ser campeón con Colo Colo (Clausura 2002) y haber cumplido mi sueño de jugar como arquero y delantero... Y haber podido marcar goles, obvio.

¿Qué recuerda del día que anotó su primer gol?

-Yo venía hace mucho tiempo pidiendo jugar de delantero. Ese día le dije a Pizzi que me pusiera arriba porque no perdíamos nada, lo conversó con Mauro Pozo, pidieron mi camiseta y entré. Yo estaba convencido de que iba a hacer un gol. Cuando alguien tiene un sueño y se lo propone y se lo propone, las cosas se dan. Y ahora lo digo por experiencia propia.

¿Qué le dijo Pizzi después?

-Estaba contento, lloraba, gritaba, estaba feliz. Fue una alegría mía, de él, de mis compañeros. Fue increíble ese día.

¿Alguna vez pensó que debió haber sido delantero en vez de arquero?

-Es que siempre me gustó jugar en las dos partes, era algo extraño. Me gusta jugar todos los deportes. Yo siempre veía fútbol americano y cuando los tipos hacían un punto pero tenían que atajar el balón para hacer un touchdown , decía "eso me gustaría hacer a mí". Pero también lo pude hacer en el fútbol.

¿Le faltó algo en su carrera?

-Jugar en la Selección Chilena, habría sido un sueño. ¿Si lo merecí en algún momento? Yo creo que sí, al principio en Unión Española, a pesar de que debuté muy joven. Y también los últimos tres años de mi carrera creo que fueron excelentes. He visto pocos arqueros que jueguen tan bien con los pies como yo.

¿Qué le parece el nivel de Claudio Bravo? Ustedes pelearon el puesto en Colo Colo...

-Claudio siempre ha mostrado solidez, es un arquero tranquilo. Y a los técnicos les da mayor seguridad un arquero tranquilo, por sobre uno que sea más "loco". Yo por lo menos me iría por uno tranquilo y Claudio es así. Le da más confianza al técnico, a sus compañeros y a los hinchas. Por eso creo que hace los partidos que hace.

¿Qué arquero le gusta de la competencia local?

-Siempre me ha gustado Paulo Garcés, para mí es uno de los mejores arqueros de Chile. Lejos. Pero por lejos...

¿Y qué le parece el momento de Johnny Herrera? Ustedes tuvieron una "pelea" pública, además...

-Es que hay muchas cosas que no concuerdo con Johnny, las cosas que habla o que hace. Pero en realidad es su vida, que haga lo que quiera, a mí me da lo mismo. Siempre he encontrado que es un excelente arquero, un tipo muy tranquilo, que da mucha seguridad. Pero yo me quedo con Paulo Garcés.

¿Alguna vez hablaron de esa polémica?

-No, nunca. Yo nunca he hablado con Johnny, a lo más me lo he pillado un par de veces.