Hernández
La Pega de Sampaoli
Este lunes en el Monasterio Celeste comienza la preparación en serio de la selección chilena con vistas a la Copa América. Tras descartarse por su alto costo la concentración en Europa será el moderno complejo de O’Higgins el laboratorio donde Sampaoli afinará el funcionamiento del equipo, analizará a los rivales y hará un trabajo de nivelación a quienes entraron en la nómina de 23 y tienen menos horas de vuelo que el resto.
La ausencia de Bravo y Vidal que recién quedarán libres tras la final de la Champions el 6 de junio en Berlín y se integrarán dos días después y el desfase con que arribará Alexis que debe disputar la final de la Copa FA el sábado 30 de mayo no son gravitantes. Los tres son titularísimos, conocen de memoria los movimientos tácticos de Sampaoli y, por lo demás, siempre será una buena noticia llegar con la confianza a tope desde sus clubes. El ejercicio es simple, Bravo llega a la Copa América como campeón de la liga española, habiendo ganado el Trofeo Zamora e invicto en 22 de los 37 partidos que disputó. Vidal después de complicaciones físicas derivadas del apuro por jugar el mundial volvió a ser el jugador todoterreno clave en la Juve y hoy Liverpool y Real Madrid preguntaron precio por él. Sánchez, en tanto, cerró la mejor temporada de liga de su carrera y su tasación se empina sobre los 61 millones de dólares.
Las tareas de Sampaoli no están ahí. Radican en trabajar la falta de gol del equipo y seguir buscando fórmulas, sin contar con especialistas, para compensar las ventajas que da Chile en el juego aéreo defensivo. Jugar por la selección es otra historia, pero a nivel de clubes la producción ofensiva de los jugadores chilenos es considerablemente inferior a la de otros favoritos. No es muy difícil darse cuenta, Alexis tuvo una temporada excepcional, pero Vargas quedó en deuda en el QPR y se lesionó justo en su mejor momento. Los números mejorarían si sumásemos la campaña de Angelo Henríquez, pero este ejercicio aplica, bajo la lógica de un efecto más realista, para los titulares de cada selección. Además, hay que ver si el goleador del Dinamo de Zagreb clasifica en la nómina definitiva de los 23 que tomarán parte del torneo. Hoy en la Roja hay tres jugadores que saben que quedarán fuera, pero Henríquez debería estar.
Respecto de las labores defensivas para nadie es un misterio que Chile sufre en los balones aéreos. La mayoría de los goles que le convierten a la Roja provienen de pelotas detenidas y para una defensa que, salvo Miiko Albornoz que no es titular, mide bajo un metro ochenta se torna complejo mejorar en esa faceta. Mark González, quizá el mejor cabeceador del fútbol chileno, hubiera sido un gran aporte en el juego aéreo pero no fue considerado entre los 23 elegidos.
Otro de los problemas de Sampaoli apunta a restaurar la confianza de jugadores como Marcelo Díaz que viene reapareciendo de una grave lesión a la rodilla y debe jugar por no descender en Alemania y Felipe Gutiérrez, un indiscutido en la consideración del casildense que también volvió hace pocas semanas en el Twente. Sumemos a Mauricio Isla que en el QPR estuvo lejos de tener la regularidad que le negó la Juve en su última etapa y Jorge Valdivia que deslumbra con menos continuidad de lo deseable en el Palmeriras.
Poniendo las cosas en el equilibrio, el panorama tiene sus complicaciones, pero también elementos positivos. A lo ya dicho del estelar momento de Alexis, Vidal y Bravo, se añade la regular temporada, sin lesiones, de Gary Medel y las nuevas alternativas que ofrecen Matías Fernández y David Pizarro. Charles Aranguiz, otro número puesto en la oncena, navega a velocidad crucero y está permanentemente en la mira de los clubes europeos. La base está y goza de buena salud.
Don Sampa tiene pega. Chile debe mejorar aspectos clave si pretende ser protagonista en la Copa América. Tiene el aval de su historia reciente, jugadores de primera línea mundial y una probada concepción de equipo, pero en esta pasada se necesita más pues estamos a pocos días del inicio de uno de los torneos más competitivos de los últimos 30 años.