Otra cosa es con guitarra
El mismísimo día que la Roja quedó eliminada en la Copa del Mundo contra Brasil, los jugadores declararon que tendrían su desquite en la Copa América. Y desde ese momento, mucha gente dio por hecho que Chile levantaría su primer trofeo continental de selecciones en el invierno de 2015.
Como suele ocurrir en Chile cuando la expectativa asoma relativamente positiva, el exitismo y la soberbia se apoderan del ambiente. Y los problemas para sortear a Ecuador en el debut, inmediatamente generaron una serie de críticas descabelladas e infundadas.
Más allá de analizar el partido del jueves, mejor resuta ver otros casos. ¿Quién podría dudar que, en el suma de individualidades, Argentina es el mejor equipo de este torneo? ¿Quién podría haber pensado que la albiceleste no le ganaría a Paraguay apenas terminado el primer tiempo?
¿Cómo anduvo Uruguay contra Jamaica? Los caribeños eran el rival fácil del grupo. Y los charrúas, los campeones defensores.
Afortunadamente, este torneo no es una carrera corrida, como algunas ligas europeas. Y, aparte de reunir a la mayor cantidad de estrellas del fútbol mundial de los últimos años, es impredecible. Eso es lo lindo del fútbol, ¿no?