¿Vidal sobra en el Bayern?
Franz Beckenbauer es la máxima leyenda del fútbol alemán y también en el Bayern Munich. El hombre es acertivo, hace valer su opinión. Está vez, el otrora crack teutón tiene entre ceja y ceja a Arturo Vidal.
Primero, el campeón del mundo como jugador y técnico en los germanos dijo que el chileno debía mantener su disciplina personal. Luego, fue más allá y se puso bien pesado con el mediocampista. "No lo necesitamos en el equipo", aseguró el Kaiser, agregando a continuación que "ya tenemos jugadores como él en el plantel".
Ante semejantes aseveraciones, la interrogante resulta obvia: ¿Vidal está demás en el Bayern Munich? La respuesta, sin la camiseta puesta y en virtud del enorme desempeño del chileno en las últimas temporadas europeas, es un evidente no.
Al contrario, el cuadro multicampeón de Alemania no posee en sus filas ni un jugador como Vidal. El ex colocolino es dúctil con el balón, realiza continuas rupturas tras la última línea de presión para marcar, lidera en forma instantánea la presión para recuperar el balón, encabeza siempre el listado de los hombres con más recorrido en el terreno de juego y el máster en táctica que realizó en su paso por el Calcio le permite, ahora, interpretar en forma magnífica el juego.
Precisamente, esta última fortaleza futbolística le va a permitir, de manera pronta, asimilar los movimientos que Pep Guardiola les exige a sus volantes. Así, las imágenes del DT del Bayern contorsionándose en la banca por una circunstancial acción equívoca del chileno serán cosa del pasado reciente. Y tampoco alimentarán los comentarios desviados de alguna posible disconformidad del entrenador con el mediocampista de la Roja.
Guardiola no solicitó en forma directa el fichaje de Vidal, pero cuando los directivos propusieron su nombre para darle más agresividad a la línea media de los bávaros, sin perder calidad en el manejo del balón, inmediatamente dijo sí a la proposición. El español quiso al chileno, porque no vislumbraba a otro integrante de su plantel con las condiciones para dar el salto evolutivo que le permita ganar la Champions League, por ejemplo.
Para imponerse en el máximo torneo de clubes del mundo, si no tienes en tus huestes al mejor jugador del planeta (como el caso del Barcelona de Pep con Lionel Messi), no basta con el fútbol de toque que desarrolla el Bayern. Es necesario también una cuota extra de temperamento, espíritu ganador, hambre de gloria, junto a aptitudes técnicas y tácticas del primer nivel futbolístico. Atributos que Vidal claramente puede aportar.
Al final, una cosa eso sí: el chileno, sin modificar su indomable naturaleza futbolística, debe consentir las exigencias tácticas de Guardiola. Tal como lo hizo Alexis Sánchez bajo el mando del catalán.
El tocopillano llegó hasta actuar de "9", no marcó en ese rol, pero sus movimientos permanente fueron muy útiles para todo el bloque ofensivo. Cuando actuó en su puesto, de puntero derecho, Pep le pedía que estuviera permanentemente pisando la línea de banda para darle amplitud al equipo y el hombre del Arsenal cumplía a rajatabla.
Seguramente, esto último ya se lo comentó Alexis a Vidal en más de alguna charla en las múltiples concentraciones de la Roja.