Atlético Nacional gana por segunda vez la Libertadores
Con gol de Miguel Borja, la figura en los últimos cuatro partidos, los colombianos derrotaron 1-0 a Independiente del Valle y ganaron el torneo por segunda vez.
Atlético Nacional derrotó 1-0 a Independiente del Valle por 1-0 y se coronó por segunda ocasión como campeón de la Copa Libertadores. El cuadro colombiano había mostrado el mejor juego del torneo y lo certificó con el trofeo máximo de clubes en Sudamérica.
Ahora es más pesada que en 1989. Regresa a sus brazos con más historia. Se la agregaron los equipos legendarios del continente. Otra vez suya, después de una campaña de campeón que ensambló con fútbol, drama, rebeldía y a veces, festejos de más que rozaron las provocaciones. Todo junto. Invicto y sin goles en contra en la primera fase. El doblete de Miguel Borja en el asalto al Morumbí. La triple atajada de Franco Armani en el Gigante de Arroyito contra Rosario Central. El agónico gol de Orlando Berrío para remontar ante los argentinos en Medellín. Los gritos, los reclamos, los tifos, la vuelta olímpica, la gloria continental…
De entrada se sacó los nervios con el gol de Borja a los ocho minutos. En un rebote que devolvió el palo el goleador marcó de pierna derecha. Ese 1-0 lo controló con el enorme rendimiento de Alejandro Guerra. El venezolano recuperó y entregó bien siempre cerca. Un respaldo total para Alex Mejía para quitar y para Macnelly Torres para crear. Con la pelota en su poder abrió por los costados para Orlando Berrío y Marlos Moreno. El juvenil se despidió en gran nivel. Su desborde picante lastimó la defensa de Independiente del Valle.
Los ecuatorianos respondieron cuando presionaron la salida del verde que se enredó con faltas. Jonny Uchuavi le dio más revoluciones, distribución de juego y profundidad con lo que salió del encierro. Se animó por la izquierda el costado más débil por el que defendió Daniel Bocanegra. Una vez más, “El Lobo” calmó todo. Pidió y cuidó el balón. Buscó a Macnelly con pase corto. En los últimos minutos cuidó la ventaja a puro toque.
Por primera vez en un título internacional para Colombia no hubo penales. Le bastó ganar el partido en Medellín para consagrarse como el mejor de América. La máxima gloria es suya porque jugó catorce partidos. De visitante ante Huracán en Buenos Aires a Independiente del Valle en casa. Ganó diez, empató tres y perdió uno. 33 puntos en 14 partidos.
Desde que llegó hace un año, Reinaldo Rueda cumple lo que promete. El título local. La Copa Libertadores. En diciembre jugará el Mundial de Clubes. Hizo de este Nacional más que un equipo ganador. Lo convirtió en un campeón de palabra.