El modelo ‘democrático’ de MotoGP es todo un éxito
Siete ganadores distintos consecutivos corroboran el acierto del plan de Ezpeleta para igualar el Mundial. La centralita única es clave
"Con la centralita única se pueden meter hasta siete pilotos con opciones de ganar”, aseguraba Ángel Nieto en su tradicional visita a AS junto a Carmelo Ezpeleta. La insistencia de igualar el Mundial del CEO de Dorna convencía al 12+1. Y el resultado del Mundial 2016 está dando la razón tanto al impulsor del modelo democrático y a la leyenda de las dos ruedas en su papel de visionario ya que precisamente son siete los pilotos que ya han ganado esta temporada en MotoGP. Y encima de forma consecutiva.
La gestión electrónica es vital para sacar el máximo rendimiento de la moto y eso se hace a través de la centralita. Al implementarse en el reglamento que sea única para todos iguala la competición... además de abaratar costes ya que el desarrollo del hardware y el software se llevaba buena parte del presupuesto. Esto daba una gran ventaja a los equipos oficiales por la posibilidad de tener muchos más euros que gastar.
El modelo de Ezpeleta demuestra el tremendo acierto ya que las victorias parciales de Lorenzo, Márquez, Rossi, Miller, Iannone, Crutchlow y Maverick, con un tercio del campeonato aún por disputarse, puede llegar a convertirse en la temporada más prolífica de la historia del certamen. El récord hasta ahora está en el 2000 cuando ocho pilotos fueron capaces de alcanzar el triunfo. Este año ya van siete y eso que oficiales como Pedrosa, Dovizioso o Aleix Espargaró todavía no integran la nómina de vencedores 2016. Llegar a nueve es factible... contando también que algún otro privado pueda seguir el camino ya pisado por Miller o Crutchlow.
Por añadidura, y como consecuencia de abrirse el abanico de pilotos ganadores, el número de marcas también es mucho más alto de lo habitual. Yamaha, Honda, Ducati y Suzuki ya han vencido. Nunca hubo una temporada con triunfos de cinco fabricantes. Sólo Aprilia podría alcanzar el hito. A priori, eso sí, algo imposible ahora.
