Kerber, la reina paciente: en la cima con 28 años y 238 días
La alemana es la tenista de más edad en llegar al número uno. Lleva 13 temporadas como profesional y se la consideraba defensiva.
Angelique Kerber recibió este domingo el premio a su paciencia. La foto frente a la Arthur Ashe con la copa plateada de Tiffany de campeona femenina y un cheque de 3,5 millones de dólares. Mañana se convertirá en la nueva número uno del mundo, clausurando 186 semanas seguidas de dominio (desde febrero de 2013) de Serena Williams.
Con 28 años y 238 días se convertirá en la reina de más edad... y es que la zurda de Bremen que creció queriendo parecerse a Steffi Graf (19 años después hay una segunda alemana en la cima) comenzó el año 10ª del mundo. Lleva 13 como profesional y en 2011 llegó a Nueva York 92º para meterse por vez primera en semifinales de un grande. Y hasta esta temporada no ha conseguido ganar el primero, en Australia derrotando en la final a Serena. Ahora, el US Open.
“Steffi siempre ha sido mi ídolo”, reconoce ella, a quien cambió la mentalidad un campo de entrenamiento que realizó con Graf en Las Vegas en marzo de 2015. Eso y el trabajo físico.
Con 1,73 m. y sin la potencia de tiro de otras top-ten, estaba encasillada en el apartado de ‘tenista defensiva’. Pero ha cambiado. En la final ante Karolina Pliskova arriesgó para ganar los últimos ocho puntos.
“Mi forma física es mejor y me permite ser más agresiva e ir a por los partidos cuando hay opción, no sólo pasar bolas. Entreno con más intensidad y he invertido más horas en el gimnasio, esprintando y realizando ejercicios de movilidad. No me preocupa ir a tres sets”, contó Kerber, de padre polaco y madre alemana. “Los sueños se han hecho realidad este año”. Tarde, pero a tiempo.