McLaren: Ron Dennis tiene los días contados en su dirección
Se le habría acabado el límite para cumplir el acuerdo de hacerse con el 100% del grupo, aunque desde el equipo no deslizan problemas.
"Ron dice categóricamente que no dejará el cargo", eso aseguran desde McLaren. Vaya por delante. Pero la realidad puede ser otra bien distinta si hacemos caso a lo que apuntan desde ‘Autosport’. La causa de la posible marcha del británico estaría en el reparto de la propiedad del Grupo McLaren, del que es presidente y director ejecutivo desde que volviera a tomar las riendas a comienzos de 2014, y se daría al finalizar el año al no renovar su actual contrato con la marca de Woking.
Todo viene porque no podría cumplir los plazos para hacerse con el 100% de la propiedad del grupo. Cuando regresó adquirió el 25% del accionariado, mientras que el montante restante se repartió entre el fondo de inversión bahreiní Mumtalakat (un 50%) y el dueño del Grupo TAG y habitual compañero de negocios Mansour Ojjeh (el otro 25%), a los que tenía la intención de comprar sus partes para hacerse con la totalidad de las participaciones según el acuerdo al que se comprometió, pero no ha podido.
No ha reunido el dinero suficiente y el tiempo se le ha acabado, aunque en McLaren dicen lo contrario y no deslizan nada que se oponga a la normalidad: "Está contratado como presidente y director ejecutivo de McLaren Technology Group y conserva una participación del 25% del grupo, exactamente igual que la de Mansour Ojjeh. Durante muchos años los accionistas han entrado en diálogo sobre el tema de los movimientos de capital y posibles reajustes, Ron y Mansour siempre han estado en el centro de esos debates y ese sigue siendo el caso".
"Por tanto, sus conversaciones recientes son más de lo mismo. No sería apropiado revelar más detalles de estas discusiones, puesto que son privadas y confidenciales", cuenta un portavoz de la formación de Woking a la publicación británica. Sin embargo, hace un mes ya surgió una información que apuntaba hacia el mismo camino y que unía el futuro de Dennis a la búsqueda de un patrocinador fuerte que le respaldara. "Nunca pararé", dijo Ron para celebrar los 50 años de su equipo en la F1. Tal vez, ahora se vea obligado a hacerlo.