Nikola Jokic deja a los Nuggets en zona de playoffs

La calidad y el espectacular estado de forma de Nikola Jokic decidieron la victoria a domicilio de los Denver Nuggets frente a Los Angeles Lakers (121-127) y, de paso, silenciaron la explosión del joven pívot croata Ivica Zubac. Jokic, de 21 años, terminó el choque con 29 puntos y 15 rebotes, mientras que Will Barton sumó 26 tantos. El español Juancho Hernangómez firmó un rebote y un tapón en siete minutos.

Por parte de los Lakers el mejor fue Lou Williams con 24 puntos, en tanto que Zubac contribuyó con 11 tantos, 13 rebotes y 3 tapones en 25 minutos. El español José Manuel Calderón aportó dos asistencias y un rebote en siete minutos. Los Nuggets llevan siete victorias seguidas a domicilio contra los Lakers, que no ganan en el Staples Center al conjunto de Colorado desde noviembre de 2012.

El equipo de Mike Malone llegó a Los Ángeles con ganas de arrasar: 40 puntos en el primer cuarto para entrar en calor, con 10 tantos de Danilo Gallinari y otros 10 de Kenneth Faried en un recital ofensivo frente a la desidia del conjunto californiano, inoperante en ataque -Luke Walton sustituyó a todo el quinteto inicial en el minuto a los seis minutos- y hundido en malas decisiones.

Esos instantes dejaron claro, por un lado, el perfecto entendimiento entre Gallinari y Jokic, con un simple bloqueo y continuación o encontrando los espacios que le gusta ocupar al serbio en la pintura, y por otro, la clarividencia de Faried penetrando y machacando el aro.

Frente al 6/6 en triples y el 13/17 en tiros de los Nuggets, la única nota positiva para los locales en ese cuarto fue la entrada en pista de Zubac, que tuvo un impacto súbito con un tapón sobre Jokic y un semigancho tras asistencia de Calderón.

Los reservas de los Lakers, con Williams y Jordan Clarkson al timón, cortaron la sangría y dieron nuevos bríos al partido con un parcial de 14-4 (42-45) del que fue testigo Hernangómez, prácticamente inédito en los cinco minutos que disputó, aunque no pudieron mantener ese nivel y se fueron al descanso 12 abajo (54-66).

Tras pasar por vestuarios, Denver aceleró y con un mayúsculo Faried construyó una renta de las que dejan huella (66-82, 80-97), y ni siquiera la sorprendente labor de Tarik Black pudo eclipsar el vendaval de juego de los Nuggets, apoyados en la abrumadora superioridad de Jokic sobre los pívots rivales.

Eso sí, la constancia de hombres como Williams, Nick Young y Brandon Ingram (15+5+4+3) redujo la brecha a un solo punto (119-120) a falta de dos minutos tras un espectacular despliegue de lanzamientos de larga distancia.

A pesar de las numerosas imprudencias de los visitantes, Jokic se convirtió en el perfecto salvavidas, ya fuera asistiendo al compañero mejor colocado o siendo decisivo con sus movimientos de espalda al aro. Con este triunfo, los de las Rocosas se colocan en zona de Playoffs al pasar a ocupar la octava posición del Oeste.