La historia del único goleador chileno de un Sudamericano
Jaime Bravo López disputó el torneo juvenil de 1964 con Chile, y con cinco goles en seis partidos, se convirtió en el goleador de la competencia.
El Sudamericano Sub 20 de 1964 se disputó en las ciudades colombianas de Barranquilla, Bogotá, Calí y Medellín, y una de las figuras fue un chileno: Jaime Bravo López, delantero de Colo Colo que marcó en cinco ocasiones en el torneo para convertirse en el goleador del campeonato. Desde esa fecha, hace 53 años, ningún otro futbolista nacional ha sido el máximo anotador de un Sudamericano Sub 20.
En 1964, Bravo sumaba sus primeros minutos en Primera División, misma situación que dos de sus compañeros en la selección chilena Sub 20, Carlos Reinoso en Audax Italiano y Elías Figueroa en Unión La Calera, pero en aquel campeonato juvenil, la figura de Chile fue solo una: Jaime Bravo, quien anotó cinco de los seis goles del equipo.
En su debut, La Roja empató 1-1 con Uruguay, luego perdió 2-0 frente a Argentina, le ganó a Perú en el tercer partido por 2-1, mismo resultado que ante Paraguay. Después dos empates, 0-0 ante Venezuela y 1-1 con Colombia. Chile terminó cuarto con siete puntos, y el campeón fue Uruguay.
La carrera de Bravo fue corta. Debutó en 1964 con veinte años, y se retiró con veintinueve en 1973. En Colo Colo no consiguió ganar ningún título, y partió a O’Higgins en 1968, año en el que se convirtió en director del Sifup. Una temporada después fichó por el desaparecido equipo de la Universidad Técnica del Estado, y en 1970 jugó por Antofagasta. Su último club fue Deportes Aviación, donde consiguió el trofeo de la Primera B en 1973, y luego vino su retiro del fútbol.
Ya fuera del fútbol profesional, el goleador del Sudamericano Sub 20 de 1964, dirigió las divisiones menores de Colo Colo entre 1990 y 1994, y en 2013 lanzó su libro “Desde el solar al verde del Nacional”, en el que relata en primera persona sus vivencias como futbolista y entrenador.
El único chileno que ha podido igual la marca de Jaime Bravo fue Arturo Vidal en 2007, quien en un lucha con el uruguayo Edison Cavani, disputaron el título de máximo anotador hasta el último partido del Sudamericano. El jugador de Bayern Múnich anotó seis goles y el uruguayo marcó siete.