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UNIVERSO FIT

8 formas inteligentes de ahorrar dinero en el gimnasio

Ponerse en forma puede suponer una inversión económica considerable. Con estos consejos se acortará la diferencia entre el peso corporal y del bolsillo.

Actualizado a
Te hemos contado cómo tener los abdominales de Ryan Reynolds sin necesidad de salir de la cocina de tu casa, y te hemos hablado ya de los beneficios de salir a correr (aunque esté lloviendo), pero por muy gratuitas que sean estas opciones crees que sólo en el gimnasio eres capaz de rendir a conciencia y sin distraerte (demasiado). Sin embargo, además de tiempo y esfuerzo, esto supone una inversión económica considerable que, en ocasiones, puede hacerte desistir de la idea. No te resignes, hay maneras de ahorrar en el gimnasio.
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Te hemos contado cómo tener los abdominales de Ryan Reynolds sin necesidad de salir de la cocina de tu casa, y te hemos hablado ya de los beneficios de salir a correr (aunque esté lloviendo), pero por muy gratuitas que sean estas opciones crees que sólo en el gimnasio eres capaz de rendir a conciencia y sin distraerte (demasiado). Sin embargo, además de tiempo y esfuerzo, esto supone una inversión económica considerable que, en ocasiones, puede hacerte desistir de la idea. No te resignes, hay maneras de ahorrar en el gimnasio.

En 1997 Bill Gates sentenció que Internet facilitaría “la información adecuada, en el momento adecuado y para el propósito adecuado”. Y si tu propósito es ahorrar dinero a la hora de ir al gimnasio (o de realizar casi cualquier otra compra) lo mejor es empezar por aquí. En los últimos años han surgido varios buscadores que permiten encontrar el gimnasio que mejor se adapta a tus necesidades y presupuesto. Un buen ejemplo es Gympass, que permite introducir filtros de búsqueda por precio máximo; Y si lo que quieres es ejercitarte puntualmente, en Ingym o Gymforless puedes encontrar pases por un día en buena parte de los gimnasios de tu ciudad.
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1. Antes de ponerte el chándal y sacar la cartera, busca en Internet

En 1997 Bill Gates sentenció que Internet facilitaría “la información adecuada, en el momento adecuado y para el propósito adecuado”. Y si tu propósito es ahorrar dinero a la hora de ir al gimnasio (o de realizar casi cualquier otra compra) lo mejor es empezar por aquí. En los últimos años han surgido varios buscadores que permiten encontrar el gimnasio que mejor se adapta a tus necesidades y presupuesto. Un buen ejemplo es Gympass, que permite introducir filtros de búsqueda por precio máximo; Y si lo que quieres es ejercitarte puntualmente, en Ingym o Gymforless puedes encontrar pases por un día en buena parte de los gimnasios de tu ciudad.

Espera un momento antes de apagar el ordenador. Si en la Red se encuentran cupones de descuento para irte de crucero con un grupo de zombies ten por seguro que también los hay para apuntarte a gimnasios normales con personas que no necesitan comerte el cerebro para ejercitarse. Una opción muy recurrente es Groupon, pero las tierras del couponing son anchas y vastas: Groupalia, Offerum, Bownty, LetsBonus... probablemente alguno tenga la oferta que buscas.
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2. Rastrea el mundo de los cupones descuento

Espera un momento antes de apagar el ordenador. Si en la Red se encuentran cupones de descuento para irte de crucero con un grupo de zombies ten por seguro que también los hay para apuntarte a gimnasios normales con personas que no necesitan comerte el cerebro para ejercitarse. Una opción muy recurrente es Groupon, pero las tierras del couponing son anchas y vastas: Groupalia, Offerum, Bownty, LetsBonus... probablemente alguno tenga la oferta que buscas.

Bueno, a ver, no te estamos diciendo que hagas trampa (principalmente porque a medio plazo no es práctico), pero muchos gimnasios tienen ofertas que te permiten probarlos de manera gratuita durante algún tiempo para que te decidas a matricularte. El último al que fuiste no te convenció del todo, pero ¡hey, tuvieron su oportunidad de seducirte y no lo consiguieron! Vuelve a comprobar la lista de gimnasios con este tipo de ofertas, y si a la siguiente va la vencida al menos te habrás ahorrado pagar los primeros días.
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3. Prueba, y si no te gusta… sigue probando

Bueno, a ver, no te estamos diciendo que hagas trampa (principalmente porque a medio plazo no es práctico), pero muchos gimnasios tienen ofertas que te permiten probarlos de manera gratuita durante algún tiempo para que te decidas a matricularte. El último al que fuiste no te convenció del todo, pero ¡hey, tuvieron su oportunidad de seducirte y no lo consiguieron! Vuelve a comprobar la lista de gimnasios con este tipo de ofertas, y si a la siguiente va la vencida al menos te habrás ahorrado pagar los primeros días.

Los gimnasios que pertenecen a cadenas carecen de capacidad de negociar con el cliente las condiciones del servicio y la matriculación, ya que siguen ofertas rígidas establecidas para todos los centros. Así lo explica Pedro García (nombre ficticio), gerente de uno de ellos y con amplia experiencia en el sector, quien recomienda para este tipo de locales estar pendiente de sus ofertas especiales, que suelen llegar a final de mes y en los meses “flojos” como julio y agosto. Existe, sin embargo, una mayor posibilidad de regatear con los dueños de las franquicias y en los centros de gama media-alta, con los que “puedes llegar a hacer virguerías” al negociar las condiciones de tu matrícula.
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4. Negocia antes de firmar, pero ten en cuenta que…

Los gimnasios que pertenecen a cadenas carecen de capacidad de negociar con el cliente las condiciones del servicio y la matriculación, ya que siguen ofertas rígidas establecidas para todos los centros. Así lo explica Pedro García (nombre ficticio), gerente de uno de ellos y con amplia experiencia en el sector, quien recomienda para este tipo de locales estar pendiente de sus ofertas especiales, que suelen llegar a final de mes y en los meses “flojos” como julio y agosto. Existe, sin embargo, una mayor posibilidad de regatear con los dueños de las franquicias y en los centros de gama media-alta, con los que “puedes llegar a hacer virguerías” al negociar las condiciones de tu matrícula.

En los últimos años de complicaciones económicas este tipo de locales se han posicionado como una buena opción para hacer ejercicio a precios muy asequibles, hasta el punto en que el último <a href="http://munideporte.com/imagenes/documentacion/ficheros/0351A7BF.pdf" target=blank>Informe de Gimnasios Low-Cost</a> en España, que la consultora Valgo publicó a principios de 2016, se apuntaba un crecimiento de la oferta del 17,5% respecto al año anterior. Sin embargo, en ese mismo estudio también se habla de una tendencia al aumento en el precio base de muchos de esos centros, que actualmente suele rondar los 22 euros + IVA de máximo. Por otra parte, la mayoría de estos gimnasios pertenecen a cadenas con las que, como dijimos anteriormente, es prácticamente imposible regatear. Además, tal y como señala un artículo publicado en <a href="http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/09/01/madrid/1472755147_117578.html" target=blank>El País</a>, suelen tener algunos riesgos añadidos como la ausencia de monitores personalizados y, por tanto, de una guía efectiva para alcanzar mejores resultados.
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5. Asegúrate de que el ‘low cost’ es ‘low’

En los últimos años de complicaciones económicas este tipo de locales se han posicionado como una buena opción para hacer ejercicio a precios muy asequibles, hasta el punto en que el último <a href="http://munideporte.com/imagenes/documentacion/ficheros/0351A7BF.pdf" target=blank>Informe de Gimnasios Low-Cost</a> en España, que la consultora Valgo publicó a principios de 2016, se apuntaba un crecimiento de la oferta del 17,5% respecto al año anterior. Sin embargo, en ese mismo estudio también se habla de una tendencia al aumento en el precio base de muchos de esos centros, que actualmente suele rondar los 22 euros + IVA de máximo. Por otra parte, la mayoría de estos gimnasios pertenecen a cadenas con las que, como dijimos anteriormente, es prácticamente imposible regatear. Además, tal y como señala un artículo publicado en <a href="http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/09/01/madrid/1472755147_117578.html" target=blank>El País</a>, suelen tener algunos riesgos añadidos como la ausencia de monitores personalizados y, por tanto, de una guía efectiva para alcanzar mejores resultados.

Es muy común encontrar planes de inscripción trimestrales, semestrales o anuales que incluyen descuentos respecto a la modalidad mensual si pagas por adelantado Pero quizás no sea lo que más te convenga si lo que quieres, además de ahorrarte unos euros, es estar realmente en forma. Según el artículo <a href="http://homepages.bw.edu/~mpisnar/A7.pd" target=blank><i>'Pricing and the psychology of consumption</i>'</a>, de los expertos en <i>marketing</i> <a href="http://www.hbs.edu/faculty/Pages/profile.aspx?facId=6464" target=blank>John T. Gourville</a> y <a href="https://www.rotman.utoronto.ca/FacultyAndResearch/Faculty/FacultyBios/Soman" target=blank>Dilip Soman</a>, el consumidor tiende a aprovechar el servicio con más frecuencia cuando se contrata por un periodo más corto de tiempo. Así, los sujetos del estudio que habían pagado de una vez por varios meses tendían a ir al gimnasio sólo en las fechas inmediatamente posteriores a la firma del contrato e inmediatamente anteriores a la extinción del mismo; mientras que los que decidían la modalidad mensual eran más regulares en la asistencia. Por otra parte, aunque a priori pueda parecer una ventaja económica, ten en cuenta que si pagas por adelantado será muy difícil o imposible recuperar ese dinero si finalmente te arrepientes de haberte inscrito.
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6. Cuidado con los abonos

Es muy común encontrar planes de inscripción trimestrales, semestrales o anuales que incluyen descuentos respecto a la modalidad mensual si pagas por adelantado Pero quizás no sea lo que más te convenga si lo que quieres, además de ahorrarte unos euros, es estar realmente en forma. Según el artículo <a href="http://homepages.bw.edu/~mpisnar/A7.pd" target=blank><i>'Pricing and the psychology of consumption</i>'</a>, de los expertos en <i>marketing</i> <a href="http://www.hbs.edu/faculty/Pages/profile.aspx?facId=6464" target=blank>John T. Gourville</a> y <a href="https://www.rotman.utoronto.ca/FacultyAndResearch/Faculty/FacultyBios/Soman" target=blank>Dilip Soman</a>, el consumidor tiende a aprovechar el servicio con más frecuencia cuando se contrata por un periodo más corto de tiempo. Así, los sujetos del estudio que habían pagado de una vez por varios meses tendían a ir al gimnasio sólo en las fechas inmediatamente posteriores a la firma del contrato e inmediatamente anteriores a la extinción del mismo; mientras que los que decidían la modalidad mensual eran más regulares en la asistencia. Por otra parte, aunque a priori pueda parecer una ventaja económica, ten en cuenta que si pagas por adelantado será muy difícil o imposible recuperar ese dinero si finalmente te arrepientes de haberte inscrito.

Vale, no todas las empresas son Google y disponen de gimnasio propio para que sus trabajadores puedan estar en forma, pero no es raro que tu compañía tenga algún tipo de acuerdo con locales de la zona que incluya descuentos para sus empleados ¿Has preguntado a tu jefe? Por otra parte, colectivos como colegios profesionales o asociaciones de consumidores suelen ofrecer a sus asociados programas de ahorro y fidelización especiales, como es el caso de los que integran la plataforma <a href="http://www.colectivosvip.com/web/es/" target=blank>Colectivos Vip</a>. Y si no, comprueba si tu compañía de seguros cuenta con promociones en algún centro de fitness y salud (a fin de cuentas, un cliente saludable es un cliente más rentable).
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7. Comprueba si a tu colectivo le hacen un precio especial

Vale, no todas las empresas son Google y disponen de gimnasio propio para que sus trabajadores puedan estar en forma, pero no es raro que tu compañía tenga algún tipo de acuerdo con locales de la zona que incluya descuentos para sus empleados ¿Has preguntado a tu jefe? Por otra parte, colectivos como colegios profesionales o asociaciones de consumidores suelen ofrecer a sus asociados programas de ahorro y fidelización especiales, como es el caso de los que integran la plataforma <a href="http://www.colectivosvip.com/web/es/" target=blank>Colectivos Vip</a>. Y si no, comprueba si tu compañía de seguros cuenta con promociones en algún centro de fitness y salud (a fin de cuentas, un cliente saludable es un cliente más rentable).

Quizás no habías barajado esta opción, pero cabe plantearse si merece la pena pagar por un gimnasio privado si puedes disfrutar de actividades e instalaciones deportivas públicas cerca de tu residencia que satisfagan tus deseos de estar en forma. Ayuntamientos y diputaciones de todo el país cuentan con una red de centros deportivos que, si bien no todos tienen carácter gratuito, sí que suelen contar con tarifas bastante reducidas (a fin de cuentas, ya has pagado por ello con tus impuestos). También las Universidades incluyen este tipo de ofertas deportivas, de la que habitualmente pueden beneficiarse también (pagando un poco más, eso si) usuarios ajenos a la comunidad universitaria.
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8. Pon tus miras más allá del gimnasio tradicional

Quizás no habías barajado esta opción, pero cabe plantearse si merece la pena pagar por un gimnasio privado si puedes disfrutar de actividades e instalaciones deportivas públicas cerca de tu residencia que satisfagan tus deseos de estar en forma. Ayuntamientos y diputaciones de todo el país cuentan con una red de centros deportivos que, si bien no todos tienen carácter gratuito, sí que suelen contar con tarifas bastante reducidas (a fin de cuentas, ya has pagado por ello con tus impuestos). También las Universidades incluyen este tipo de ofertas deportivas, de la que habitualmente pueden beneficiarse también (pagando un poco más, eso si) usuarios ajenos a la comunidad universitaria.

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