La UC deja dudas pero celebra gracias a un insólito autogol

Universidad Católica estuvo muy cerca, demasiado, de quedar muy lejos de los líderes del Torneo de Clausura y prácticamente despedirse de la lucha por el título. Pero no sucedió gracias a uno de los autogoles más insólitos del último tiempo y que le permitió a los cruzados imponerse a Temuco 2-1 con muchos problemas.

Los líos para la UC comenzaron por su propio nivel. El cuadro de Mario Salas se asemejó al equipo de las primeras fechas, cuando no había conexión entre las líneas y la falta de profundidad era algo habitual.

Temuco supo aprovechar la abulia de Católica. Cristián Canío ganó las espaldas de Kalinski y Fuentes, y marcó un golazo con un zurdazo que se clavó en el ángulo derecho de Toselli (20').

La reacción del cuadro local recién llegó en el segundo tiempo. Salas reordenó a sus hombres y el efecto fue inmediato porque a los 48', en la primera llegada de Católica, Enzo Kalinski anotó el 1-1 con un ajustado remate desde fuera del área.

Sin embargo, los cruzados no se llevaron por delante a Temuco. Si bien se instalaron en campo rival, los albiverdes cerraron las líneas de pases y la UC no pudo ser profundo. Sólo un error, uno de los más insólitos del último tiempo, desniveló el cotejo.

Tiro de esquina, la defensa de Temuco no puede sacar el balón y Lucas Campana, en su intento por rechazar, termina anotando un autogol con la pantorrilla, entre las piernas de un desesperado Luis Marín (76').

Universidad Católica no jugó bien, pero logró un triunfo que con 12 unidades, lo deja a la expectativa de lo que pueda pasar con Colo Colo en Iquique y en el Superclásico de la próxima semana.