Retro

Si Snapchat, Instagram o Tinder hubiesen existido en los '90

Habrían sido insufribles, pero también nostálgicamente perfectos

Si Snapchat, Instagram o Tinder hubiesen existido en los '90

Hoy en día estamos acostumbrados a mirar nuestro móvil, introducir el patrón de desbloqueo, y tener un mundo de posibilidades. Te haces un selfie y puedes elegir si lo subes a Facebook, Instagram, Snapchat o quizá te veas tan guapo/a como para ponértelo de foto de perfil en WhatsApp o Tinder. O si no te gusta la dejas ahí porque tienes un arcón de gigas con tropecientas fotos que no verás jamás.

Tu vida es muy rica gracias a eso (aunque pierdas algo el tiempo, también hay que reconocerlo), pero si hubieras tenido las mismas herramientas que tienes ahora en tu mano en los años 90 todo esto podría haber sido mucho más complicado.

El canal de Youtube SquirrelMonkeyCom lleva un tiempo dedicándose a recrear cómo serías las apps actuales con la interfaz de los ordenadores y tecnología de los 90. Si te ha tocado vivirlo ya sabrás: disquetes a modo de discos duros en los que solo se podía guardar un archivo de Word (y gracias), conexiones a internet que se cortaban cuando tu madre llamaba por teléfono, una estética protagonizada por el tragicómico WordArt y una vida social -en lo que a internet respecta- cuyo cénit estaba protagonizado por el zumbido del Messenger.

Su último vídeo, en el que desgrana un Snapchat creado en los 90, da una muestra de todos los probemas que habría. Primero, tendrías que escanear una foto porque aún no había cámaras digitales accesibles a todo el mundo. Después, subirla a internet -esperando aproximadamente media hora- y más tarde usar una interfaz puramente noventera para añadir los filtros.

El vídeo, que ha sumado más de 60.000 reproducciones en los últimos días, adelanta además las actualizaciones del futuro: "tendrá una interfaz que solo sabrán usar los menores de 25".

Los mismo ocurre con Instagram, donde nuestros selfies no quedarían tan monos, pero tendrían un toque vintage-friki bastante logrado a años vista.

Con Tinder, donde en vez de ligar parecería que estamos entrando en la Deep Web.

O con Facebook y Youtube: olvídate de los gifs y los vídeos en 4K, amigo, y prepárate para disfrutar de la nostalgia de las conexiones hiperlentas. Tranquilo, si ha vuelto el cassette, esto también lo hará.