NUTRICIÓN

¿Cuál es la mejor bebida para hidratarnos tras el ejercicio?

Tras hacer ejercicio, no todo vale para hidratarnos correctamente. Un estudio demuestra que la mejor bebida ello es, por sorpresa, la leche desnatada.

¿Cuál es la mejor bebida para hidratarnos tras el ejercicio?

¿Qué podemos hacer para reponer una correcta hidratación tras el ejercicio físico intenso o en nuestro día a día? Parece evidente que el agua es fundamental, y de hecho se recomienda beber unos dos litros de agua al día para asegurar que nos hidratamos correctamente. Sin embargo, un estudio publicado el pasado año nos dice cuáles son las mejores bebidas para ello, ya sea después de entrenar o en nuestro día a día.

La investigación británica tuvo en cuenta trece bebidas distintas en 72 sujetos a los que se administró agua como bebida de control. El índice de hidratación de las bebidas es una medida que señala la cantidad de tiempo que ésta permanece en nuestro cuerpo antes de ser excretada a través de la orina.

Sorprendentemente, la bebida que mejor nos hidrata es la leche desnatada, inmediatamente después de una solución a base de sales minerales, que obtuvo el primer puesto. Tras la leche desnatada, encontramos la leche entera. Según el gráfico, a estos dos tipos de leche les siguen, en este orden, el zumo de naranja, los refrescos de cola (con azúcar y sin azúcar) y el té.

Se quedan fuera de los primeros puestos y por debajo del agua en índice de hidratación otras bebidas como la cerveza, las bebidas deportivas isotónicas o el café. Así que no os dejéis engañar si os dicen que un par de birras son buenas después de hacer deporte por su efecto hidratante, mejor tomaros un buen vaso de leche desnatada. Y por supuesto, olvidad el café, ya que obtiene la deshonrosa última posición en el estudio llevado a cabo.

Según el experto Brian Timmons, que realizó un estudio similar, “la leche es mejor que las bebidas deportivas o el agua porque contienen proteínas de alto valor biológico, carbohidratos, calcio y electrolitos. Asimismo, la leche reemplaza el sodio perdido a través del sudor y ayuda al organismo a retener mejor los fluidos.