El coach de Alonso responde a las ironías de Hamilton

Con su polo del recién estrenado equipo McLaren Honda Andretti son pocos los que reconocen en Gil de Ferran al campeón de la CART en 2000 y 2001 y al ganador un año después de las 500 Millas de Indianápolis. Ha ganado algo de peso el brasileño, pero conserva intacta su sabiduría. Y eso es, precisamente, lo que le interesa a Fernando Alonso. De Ferran es el coach, el entrenador personal del asturiano, en el pilotaje en óvalos y en una carrera como la Indy 500.

No es un cualquiera en el automovilismo mundial, menos aún en el americano, y ha sido elegido por Alonso para contarle los secretos de una disciplina nueva para el bicampeón del mundo de Fórmula 1. Pero ayer, en una reunión con periodistas, AS le preguntó por las palabras de otro campeón desde Mónaco. Lewis Hamilton habló del quinto puesto de Alonso en su debut en la clasificatoria de Indy como significativo del nivel de pilotaje de esta prueba.

Gil de Ferran no está de acuerdo y lo pone en positivo: "Es su forma de verlo, la mía es totalmente distinta, está claro. El nivel de pilotos de IndyCar y en las 500 Millas de Indianápolis es muy bueno, muy bueno y el quinto de Alonso, que lo esté haciendo tan bien, solo quiere decir que Fernando es muy, muy bueno".  ¿Tanto como para ganar la Indy 500 en su primera vez? "Tiene la oportunidad de ganar. Los entrenamientos han ido muy bien, ya sea corriendo solo o en tráfico, y cada día ha ido mejorando", declaró.

Aunque, conociendo como conoce esta carrera se muestra cauto: "Hay muchos elementos que están fuera de nuestro control, pero lo realmente importante es que Alonso está conduciendo muy bien y se ha adaptado genial a cada nueva situación que se ha enfrentado. En la clasificación estuvo perfecto". Y a la vez optimista: "Además, el equipo está bien preparado y los ingenieros han hecho un gran trabajo con el coche. Pero es verdad que son tres horas y media de carrera, que hay pit stops, estrategias… en carrera puede pasar cualquier cosa".

Al brasileño le impresionó la actitud de Fernando en la sesión clasificatoria: "Fernando lo hizo muy bien en la clasificación, no era fácil porque ahí vas solo y el coche tiene muy poca sujeción. Es muy ligero y difícil de manejar. Además, el equilibrio cambia constantemente porque las ruedas se van desgastando. Es como conducir en hielo a 230 millas por hora, pero en la carrera será muy diferente".

Según cuentan los que han trabajado con él, Alonso tiene una muy buena cualidad y es que pillar todo a la primera y rápido. De Ferran nos ofrece otras virtudes: "A Fernando le gusta cuidar hasta el mínimo detalle de todo lo que concierne al coche, a la estrategia, los ingenieros... Es una parte del trabajo con la que disfruta enormemente, y yo también. Quiere saberlo todo y te lleva al límite. Cuando tienes un piloto completamente comprometido con el éxito el nivel de los demás en el equipo sube como la espuma". Tanto, quizá, como para demostrar a Hamilton que el reto del español no es tan fácil como parece.