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Enfundado en una bandera chilena Alexis Sánchez levantó este sábado la Copa F.A en medio de un mar de rumores sobre su futuro que estaría más cerca de Múnich, Paris o Manchester que de permanecer en el Arsenal, club con que tiene contrato hasta junio de 2018. El Niño Maravilla volvió a brillar, marcó el primer tanto de la victoria por 2 a 1 ante el Chelsea, participó con un pase precioso en la jugada del segundo gol y fue agente de riesgo permanente para la portería del campeón de la Liga Premier. Si no fue la figura de la cancha, pego en el palo y la pelota se paseó por la línea. Crack.

Si previo al partido la prensa londinense especulaba sobre la posibilidad de que Alexis jugara su último encuentro con la camiseta de los Cañoneros, los rumores, de seguro, se acentuarán en los próximos días. Es que Alexis es objeto de deseo de los mejores equipos del mundo y permaneciendo en el equipo de Wenger está fuera de la órbita de la Champions, donde un jugador de su categoría no puede faltar. Haber rematado en el quinto puesto la liga es el peor escenario negociador para el Arsenal.

Como rara vez sucede, en las últimas semanas Alexis concedió varias entrevistas a medios ingleses y, si bien fue político y expresó su respeto por Wenger, dijo que había ido a Inglaterra para ganar la Premier y la Champions, que se sentía en deuda. La Copa F.A, el torneo más antiguo del planeta, fue un bálsamo, un consuelo importante, pero no cambia su percepción. Alexis quiere más, ir por cosas grandes, como le recomendó Arturo Vidal, si quiere trascender debe ir Múnich “al mejor equipo del mundo”, según la valoración del Rey Arturo.

El mayor desafío en el periodismo actual, en todos sus ámbitos, es filtrar informaciones falsas o inexactas. El mundo del deporte, y del fútbol en particular, provee contenidos relevantes a miles y miles de medios y la tarea principal de aquellos comprometidos con un ejercicio serio y veraz es hacer la pega, reportear con fuentes de primera mano y no colgarse de publicaciones de terceros. Hoy es muy común citar a otro medio respecto de un asunto de interés masivo. ¿Pero qué pasa después si la información se desmiente? ¿Solo pierde credibilidad el medio de origen? Esta reflexión, atingente para cada información que se publica, apunta a tomar con pinzas las especulaciones que dicen que el Bayern Munich habría congelado la operación por Alexis porque es díscolo y se pelea en la cancha con sus compañeros. Tiene mucha más verosimilitud que su sueldo sea una eventual piedra de tope que asegurar que no será contratado por su mal carácter.

Con todo, Alexis debe salir del Arsenal. Que los Cañoneros hayan quedado fuera de la Champions por primera vez después de 20 años es un hecho demasiado concluyente. Alexis y la Liga de Campeones de Europa no pueden bifurcarse, ahí está la elite, la máxima competencia, el dinero, las grandes audiencias, todo. Un goleador de clase mundial como AS7 no puede conformarse con jugar la Europa League e intentar ganar la liga local con un equipo que lleva 13 años sin conseguirlo. Con todo respeto, es un desafío demasiado menor para Sánchez aunque le ofrezcan el Big Ben y toda la plata del mundo por renovar.

Si Alexis ganó dos Copas América con Chile, fue elegido el mejor jugador de la Copa América Centenario, tiene diez títulos en el fútbol europeo, un mundial de clubes y capaz que levante la Copa Confederaciones en un mes y medio más, llegó la hora de que vaya por la Champions. Aquella que se le negó en el Barcelona y que con el Arsenal jamás va a conquistar.