ELECCIONES HACKEADAS

Cómo hackers rusos intentaron manipular las elecciones de Donald Trump

Un informe filtrado de la NSA lo asegura. Su responsable ha sido detenida.

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Cómo hackers rusos intentaron manipular las elecciones de Donald Trump

La administración de Barack Obama no dudó en señalarlo de forma directa alegando a que era lo peor que Rusia había hecho “desde la Guerra Fría“. El FBI, la CIA, la NSA, todos señalan con el dedo a los hackers rusos de Vladimir Putin y no dudan en decirlo claro: las elecciones de 2016 a la presidencia americana fueron manipuladas. Y lo hicieron con el propósito de afectar a la campaña de Hillary Clinton, ya que nadie pensaba que Donald Trump saldría elegido. Pero si os resistís a creer esto por considerarlo una teoría conspiparanoica, aquí tenéis una prueba fehaciente de que hubo algo que olía a podrido en las Elecciones USA 2016.

 Manipular las elecciones de Donald Trump

En una época digital en la que gente como Edward Snowden o Julian Assange se han jugado el tipo publicado todo tipo de informes, registros, archivos y datos secretos para hacer ver la corrupción, espionaje y todo lo que rodea a las altas esferas del mundo, la información digital lo es todo. Y el medio digital The Intercept ha publicado una de esas bombas virales en forma de un informe Top Secret al más alto nivel de cifrado de la NSA (la Agencia Nacional de Seguridad) americana. En el informe se recoge que varios grupos de hackers rusos jugaron un papel importante en el resultado de las elecciones americanas recientes.

La campaña orquestada desde la madre Rusia durante la pre-campaña de las elecciones entre Clinton y Trump incluye objetivos como dirigir sus ataques a una compañía que se encarga del software para las votaciones en Estados Unidos, correos de malware Phishing a más de 100 oficiales locales justo el día antes de las Elecciones, a empleados de una compañía anónima de sistemas de votos, y el intento de manipular directamente la infraestructura del voto americano a través de correos, hacks y otras acciones para “probablemente intentar obtener información asociada con el hardware y las aplicaciones de software relacionadas con las elecciones”

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Un informe verídico

Las conclusiones de la NSA afirman que no hay pruebas de que el grupo de hackers tuviese acceso directo al total de los votos en el día de las Elecciones, ni tampoco que hubiesen conseguido alterar directamente el resultado de estas, pero sí que indican que con toda claridad el gobierno ruso trabajó para comprometer las organizaciones y a los individuos encargados de proveer los equipos necesarios para las votaciones así como de mantener los listados de candidatos. Por tanto se mantiene la creencia de que Rusia ayudó, de forma indirecta, a Trump en las elecciones.

Pero, ¿realmente tiene validez este informe? Expertos y analistas del sector no han dudado de la legitimidad de lo que The Intercept ha publicado. Y la prueba más palpable es que el pasado sábado, el FBI detuvo a Reality Leigh Winner, una contratista del gobierno de 25 años bajo los cargos de “reunir, transmitir o perder información de Defensa”, algo que ella misma admitió afirmando que copió el informe secreto de la NSA y se lo envió al medio para que este lo publicase.

Reality Leigh, la contratista que copió el informe secreto de la NSA y lo hizo público, fue detenida por el FBI
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Reality Leigh, la contratista que copió el informe secreto de la NSA y lo hizo público, fue detenida por el FBI

¿Vuelve la Guerra Fría?

En diciembre fue Obama el que apuntó a Rusia y condenó el hackeo de las elecciones cuando los hackers robaron y publicaron emails privados de la campaña de Hillary Clinton y el Comité Democrático Nacional. En enero fue el mismo director de la Inteligencia Nacional el que atribuyó las filtraciones a una campaña rusa de influencia ordenada por Putin, a lo que el ruso negó el mismo haberlo hecho y señaló que podrían haber sido ‘patriotas’ afines a los intereses rusos. El informe de la NSA deja claro lo que las agencias de seguridad piensan del tema, algo que por descontado Donald Trump prefiere ignorar y de hecho cortar por lo sano, ya que cuando el director del FBI, James Comey, le cuestionó en abierto sobre lo sucedido con rusa, el presidente lo despidió inmediatamente y nombró a otro.