Llega Ícaro, el documental de Netflix sobre el dopaje ruso
La plataforma digital estrena este viernes 4 de agosto este documental de Bryan Fogel sobre el dopaje deportivo en Rusia
Netflix lanza este viernes 4 de agosto, a partir de las 9 de la mañana, su exitoso documental original "Ícaro", en el que desentraña la trama de dopaje que provocó la exclusión de los atletas rusos de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Esta obra audiovisual es fruto del trabajo del director estadounidense Bryan Fogel, y de su amistad con el exdirector del laboratorio antidopaje ruso Grigori Rodchenkov.
La producción ganó el premio Orwell en el Festival de Cine de Sundance y el premio de la audiencia en la edición del Festival en Londres.
La amistad con el director antidopaje
El largometraje de 121 minutos es un viaje desde la inquietud de su director por demostrar el fracaso de los sistemas de control antidopaje hasta la trama rusa de dopaje de Estado probada en el informe McLaren.
El cineasta americano entró en contacto con Rodchenkov a través del científico estadounidense Don Catlin, fundador del laboratorio antidopaje de la Universidad de California (UCLA), a quien ofreció supervisar su experimento de dopaje controlado y que decidió referirle a su colega ruso.
La idea era hacer un experimento personal dopándose a sí mismo, ya que era un atleta amateur. Pero esa amistad provocó que, cuando comenzaron a destaparse los casos de dopaje ruso en noviembre de 2015 y Rodchenkov vio su vida en peligro tras dimitir de su cargo, decidiera refugiarse en Los Ángeles (Estados Unidos) con Fogel.
Rodchenkov quiso contarlo todo
"La película, la historia de mi viaje, tomó un rumbo espectacular. Comencé explorando un asunto y terminé en una historia un millón de veces mayor de lo que hubiera podido imaginar, una historia que literalmente cambia la historia de todos los deportes, que cambia toda la historia olímpica", reconoce Fogel.
Ícaro disecciona a partir de entrevistas a Rodchenkov y otros especialistas cómo se produjo la trama de dopaje, especialmente en lo relativo a la custodia de las pruebas antidopaje en los Juegos Olímpicos de Invierno 2014 disputados en la ciudad rusa de Sochi, donde los científicos rusos cambiaban muestras de atletas dopados por otros frascos de orina limpia de esos mismos deportistas.
Fogel asegura que no fue difícil que Rodchenkov accediera a darle esa información para el documental, ya que para entonces, una vez exiliado de Rusia, el objetivo del científico era "mostrar al mundo lo que estaba pasando".
"No tuve que convencerle, él quería hacerlo, era su decisión. Yo simplemente me convertí en el cineasta, el periodista, su amigo y protector, que le ayudó a llevar su historia a todo el mundo", explica.