ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

HOCKEY

La estrella de las Diablas que es nieta de un histórico de Colo Colo

Manuela Urroz, reciente subcampeona panamericana con la selección chilena, nació en una familia llena de figuras.

La estrella de las Diablas que es nieta de un histórico de Colo Colo

Manuela Urroz no conoció a su abuelo, pero creció escuchando su historia. Francisco Urroz fue dos veces campeón en Colo Colo, donde jugó 110 partidos, y capitán de Unión Española. También fue parte del plantel que disputó el Mundial de Brasil 1950, y falleció en 1991, el mismo año que nació su nieta.

“Me habría gustado que estuviese vivo, creo que estaría muy orgulloso de sus nietos”, dice hoy Manuela, una de las figuras de la selección chilena de hockey césped, y que viene de ser subcampeona panamericana en el torneo disputado en Estados Unidos.

Manuela nació en una familia de deportistas. Además de su abuelo, su tía Silvana Urroz es hasta hoy la segunda mejor jugadora chilena en la WTA (llegó a ser 117° del mundo), y su hermano, Francisco es seleccionado de rugby. “Lo tenemos en la sangre, somos competitivos”, dice.

Con esa herencia, era razonable que ella siguiera un camino similar. Lo inesperado fue que armó su ruta en otro deporte. “Me encariñé con el hockey en el colegio. Me entusiasmé de a poco, me di cuenta que era buena. Desde ahí no paré de jugar”, recuerda.

A partir de ahí fue quemando etapas. Destacó a nivel escolar, de clubes, selecciones juveniles, y las Diablas, donde suma una amplia colección de medallas. Un rendimiento ascendente que le permitió emigrar al Royal Antwerp, club de la primera división de Bélgica. 

“Ésta será mi tercera temporada en Amberes. La liga es profesional, competitiva y muy diferente a la chilena. Tengo un sueldo, me costean los pasajes, el alojamiento, y puedo vivir cien por ciento de esto", relata sobre su vida en Europa.

"Tengo contrato hasta mayo, y mi idea es seguir alcanzado metas", dice Manuela sobre lo que viene. Con 26 años no piensa en parar. Tal como lo hizo su abuelo, ella también sueña con llegar a un Mundial.