La molestia de Marchionne: "La cagamos, esto no es Ferrari"
El presidente italiano se fue de Monza con un tremendo disgusto por perder con tanta diferencia con Mercedes ante su afición.
La depresión postvacacional es una grave realidad en Ferrari. Antes de marcharse a colocar la toalla en la arena de la playa todo fue alegría en Hungría con un doblete y victoria de Vettel que le aupó en su liderato. Pero, dos carreras después, hay cambio de líder en el Mundial y de ánimo en la Scuderia. Por más que se pudiera anticipar el éxito de Mercedes en circuitos como Spa y Monza por su mayor potencia de motor, Sergio Marchionne se marchó del GP de Italia con un disgusto tremendo que no pudo esconder ante los medios.
"Creo que simplemente la cagamos", ese fue el drástico resumen que hizo del fin de semana del equipo italiano ante su siempre exigente afición. ¿Qué les pasó para perder tanto terreno con Mercedes? El presidente de los de Maranello dice que se confiaron: "La puesta a punto del coche era la equivocada y creo que subestimamos el circuito. Es más, creo que la hemos cagado desde Bélgica, desde Spa, hasta aquí. Ahora tenemos que regresar a la fábrica y averiguar por qué el coche iba así".
A pesar de que Vettel no salió tan mal parado de un trazado que favorecía el rendimiento de las flechas de plata (solo está a tres puntos de Hamilton) y de que en Spa tenían casi mejor ritmo que sus rivales, se vio a un Marchionne demasiado negativo. "Sufrimos, el monoplaza no mejoró con respecto a hace una semana por lo que algo no ha funcionado. Creo que la falta de libres el sábado y la clasificación afectaron a nuestro rendimiento. Mercedes fue superior y no pudimos hacer nada", sentencia.
Ahora bien, esto no se acaba aquí. "Volveremos en Singapur", asegura. Allí todo debería apretarse de nuevo, pero...: "¿Si nos favorecerá? Sí, pero hay un problema, fue casi vergonzoso ver la diferencia que había entre nosotros y Mercedes. El pasado fin de semana fue diferente. Así que, obviamente, hemos perdido algo en los últimos siete días. Esto no es Ferrari, tenemos que duplicar nuestro compromiso. Los próximos circuitos serán más favorables, pero eso no significa nada". Y es que perder en casa siempre duele más.