Las 5 conclusiones que dejó el Gran Premio de Italia
Lewis y Mercedes, un paso por delante de la Scuderia, Ricciardo vuelve a brillar, a los jóvenes les falta aún experiencia y Alonso busca talismán.
Hamilton, brillo del ganador
Lo tiene. Hubo una época, aquella primera con Mercedes, en la que se le quitó un poco ese brillo a Lewis Hamilton, pero lo recuperó y ahora es la gran estrella de la Fórmula 1. Pero también es un piloto magnífico, uno de los mejores de siempre, que tiene un coche bueno y lo sabe aprovechar. En Monza hizo la pole 69 superando a Schumacher, ganó la carrera y se puso líder con tres puntos de ventaja sobre Vettel. Le salió todo bien.
Ferrari naranja
No fue el rojo Ferrari al que estamos acostumbrados esta temporada el de la Scuderia. En su casa quedó claro que el motor Mercedes, el coche de Mercedes, sigue siendo el mejor en circuitos en los que la potencia es lo más importante. Hamilton incluso se permitió el lujo de ganar con la penúltima velocidad punta de la parrilla. Y sus pilotos no son los mejores, lo siento señor Marchionnne. Vettel es muy, muy bueno, pero no es Hamilton ni Alonso, aunque puede que gane el Mundial. Y Raikkonen… En fin.
Ricciardo es Zidane
Elegante, rápido, desprende buena onda… y es muy, muy bueno. Daniel Ricciardo salía decimosexto y terminó cuarto y cerca del podio. El australiano de Red Bull volvió a demostrar su clase con una carrera ejemplar y además marcó la vuelta rápida de la carrera. Es un piloto que merece luchar por el Mundial. Mientras su talentoso e idolatrado compañero volvió a meterse en líos y terminó décimo, un punto con un coche que estaba para luchar por la victoria aquí sin las sanciones.
Jóvenes, pero aún no tan preparados
Hablo sobre todo de Stroll, también de Ocon, pero menos. Y es que el canadiense, después de una gran sesión clasificatoria en lluvia, salía segundo tras Hamilton, se vino abajo, le adelantaron Bottas, Vettel, Ricciardo, Ocon… y quedó muy cerca de él su compañero Felipe Massa que salía mucho más atrás. Le falta aún mucho al joven canadiense. El francés de Force India terminó sexto, pero brilló más.
Alonso busca talismán
Cuando no puede ser no puede ser y además es imposible decía el torero. Estuvo un amigo, alguien que le hizo salir grande, pero ni siquiera la magia de quien transformó en imágenes aquel último día con Ferrari hizo que cambiara la suerte. Alonso abandonó. Noveno vez en la temporada. Y esta vez fue por la caja de cambios y porque el equipo quiso, poca responsabilidad de Honda esta vez. Esta semana puede ser clave para su futuro. Esperemos que sea para bien. Lo merece.