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Vera

Sensibilidad extrema con Valdivia

Actualizado a
Sensibilidad extrema con Valdivia
ANDRES PINA/PHOTOSPORT

"Una estupidez de (Eduardo) Gamboa. Lo único que le dije es que cuando arbitraban afuera eran totalmente diferentes". Esta 'terrible' frase podría costarle una dura sanción a Jorge Valdivia.

Sin duda es una muestra de hipersensibilidad hacia el '10' albo, quien no dijo nada muy polémico ni provocativo. Sus reclamos dentro de la cancha tendrán la sanción debida. Esa amarilla, como las otras cuatro, tal vez fueron merecidas, pero de ahí a sancionarlo por unas declaraciones post partido es un despropósito. ¿Nunca se le podrá cuestionar nada a los árbitros tras el término de un encuentro? Si así fuera, todos los partidos terminarían con un par de 'sancionados por secretaría'.

Ha pasado antes. Barroso habló de "cosas extrañas", Christian Ledesma acusó "robo" y el 'Fantasma' Figueroa trató de "rata" al presidente de Ñublense. Ninguna de esas declaraciones pueden ser comparables con este caso.

El fútbol es opinable, más aún después del pitazo final. Y si no hay insultos, denuncias graves o descalificaciones, no hay por qué sancionar. Valdivia se perderá el duelo con San Luis y eso es suficiente.

Raúl Ormeño, asesor de Colo Colo, dijo que en el club tiene la estadística de que "le hacen siete u ocho faltas por tiempo". En estricto rigor, le han hecho 36 en los seis partidos del torneo oficial - el que lo sigue ha sufrido 20- y muchos de esos fouls no son sancionados con amarilla. Es natural que el 'Mago' en algún momento se ofusque y quiera protección.

Está bien, no hay que reclamar, pero dentro de una cancha y recibiendo patadas, la reacción es esperable. Más si es alguien que siempre ha vivido el fútbol así. 

Lo que pasa en la cancha queda ahí. Y en ese contexto, Valdivia tendrá el castigo correspondiente. Ir más allá, dejará en evidencia que los árbitros desean desviar la atención por su mal cometido durante el torneo.