La constante de Pablo Guede en su carrera: siempre renunció
Por distintos motivos, el técnico siempre decidió abandonar los clubes que dirigió antes del término de su contrato: El Palo, Nueva Chicago, Palestino y San Lorenzo.
"Pablo Guede quiere hacer una evaluación personal a fin de campeonato". Esa es la frase que lanzó Aníbal Mosa este miércoles, y que evidencia el ambiente que se vive en Colo Colo por el futuro del entrenador: el argentino analizaría la opción de renunciar al club pase lo que pase en el descenlace del Transición.
Aunque esa no es una decisión nueva. Al contrario, los antecedentes demuestran que es un accionar lógico dentro de la carrera del técnico, que renunció a sus cuatro equipos anteriores.
La primera vez se excusó con motivos personales. A mediados del 2013, cuando dirigía a El Palo de la cuarta división española y lo había encaminado a un histórico ascenso, regresó a Argentina. "Tuve un problema familiar que me obligó a volver", dijo después en una entrevista con Clarín.
Meses después firmó en Nueva Chicago, equipo con el que consiguió subir a la Primera B Nacional en abril del 2014 tras una campaña exitosa. Esa vez, a días del logro, también dejó el club, y también argumentó complicaciones más íntimas: "No arreglé nada con nadie, lo decido por temas familiares", dijo en su despedida.
Sin embargo, 37 días después fue oficializado como el nuevo entrenador de Palestino. En el cuadro árabe destacó y encabezó una campaña que permitió al club regresar a la Copa Libertadores después de 36 años. Pero la historia se repitió pese a haber renovado hasta el 2017: una propuesta de San Lorenzo lo hizo volver a Argentina, donde ganó la Supercopa y alcanzó el subcampeonato en el torneo local.
Allá volvió a renunciar. A mediados del 2016 dejó el cuadro argentino por diferencias con los dirigentes y disconformidad con el plantel que se armaba para el segundo semestre. Sin embargo, de acuerdo al interior de Colo Colo, Aníbal Mosa negoció su llegada al Monumental cuando aún dirigía al 'Ciclón'. De hecho, el presidente de Blanco y Negro viajó a Argentina.
Esta vez pareciera que el camino no será muy diferente. Las señales del técnico sobre una posible partida son claras, y otra vez, tal como lo hizo antes, podría abandonar su proyecto.