Boston Celtics amplía dominio tras derrotar a los Sixers
Boston cierra noviembre con un 14-2 de balance. Gran partido de Horford y buenos minutos de Morris y Tatum. Embiid no jugó y Saric destacó en Philadelphia.
Los Celtics olvidaron la derrota ante los Pistons a costa de unos Sixers a los que se les notó el back to back. Como ocurre en estos casos Joel Embiid no jugó. Y sin el camerunés, Philadelphia es un equipo más vulnerable. Sobre todo ante contrincantes como el que tuvieron esta madrugada enfrente. No fue ninguna paliza (108-97), pero Boston dio siempre la sensación de tener el partido bajo control. Con Kyrie Irving (36 puntos —12/21 en tiros y 5/8 en triples—, 4 rebotes y 3 asistencias en 33 minutos) y Al Horford (21+8+5) en su mejor versión, los verdes sumaron su decimonoveno triunfo (en 23 encuentros) del curso para reforzar su liderato ante unos Rockets (17-4) que vienen pisando fuerte.
Pese a su gran acierto exterior (16/32 para convertirse en el segundo visitante de la historia con más triples anotados en Boston) y los 17 puntos extra en segundas opciones (por solo 5 de los locales), Philadelphia no logró llegar a los 99 puntos. Así que ya son 52 victorias seguidas para los Celtics cuando consiguen dejar a su rival por debajo de esta cifra. Mucho crédito en este gran trabajo defensivo hay que dárselo a Al Horford. Irving y hasta los jóvenes Tatum (otro gran final para alguien que, insisto, no parece un rookie) y Brown suelen acaparar los focos, pero el trabajo que el dominicano está realizando en ambos aros esta campaña es formidable. Anoche volvió a realizar un gran trabajo frenando a la estrella rival (15+6+7+5 robos para Ben Simmons, quien perdió 5 balones y firmó un 6/14 en tiros) y en ataque desatascó el juego de su equipo con su muñeca, movilidad y visión de juego.
Y si Horford estuvo fantástico, el otro all star del equipo no le fue menos. Con sus 20 puntos en la primera parte, Irving fue el gran culpable del despegar de los suyos en el marcador. El talento y el amplio abanico de recursos con el que cuenta hacen que para él anotar sea fácil. Muy fácil. Esa es la sensación que uno tiene cada vez que se le ve penetrar a canasta o levantarse por fuera. Es su quinta actuación de al menos 30 como celtic, la cuarta en las siete últimas citas. Por su fuera poco, su regreso al partido ya en el último acto acabó por inclinar la balanza del lado verde. Un periodo en el que volvió a impresionar Jayson Tatum. Qué físico, qué clase y vaya selección de decisiones. Brad Stevens tiene un tesoro entre sus manos.
Pese a la derrota, Dario Saric (18+10+4) volvió a completar una notable actuación. Fue el más regular de su equipo, aunque la explosión anotadora de Redick en el tercer cuarto fue la que permitió a los Sixers ponerse por delante (65-67) ya avanzado el tercer cuarto. Momento complicado que salvó muy bien la segunda unidad de Boston con Marcus Morris (17+5+3) como ejecutor y Marcus Smart en el rol de director de orquesta (8 asistencias y un +15, el mejor de su equipo). Boston cierra noviembre con 14 victorias (13 en sus 15 últimos compromisos ante Philly) que les permiten igualar su mejor marca de siempre en este mes. Toca pasar página en el calendario.