"¿En qué siglo estamos?": la carta viral de una azafata ante la polémica en la F1

El pasado 31 de enero saltaba la polémica. La Fórmula 1 decidía prohibir las azafatas o Grid Girls en su competición tras varios años de críticas y opiniones encontradas sobre lo que algunos consideran una función sexista de la mujer. El debate se ha extendido rápidamente al resto de deportes, con la MotoGP decidiendo, al menos por el momento, mantener a sus trabajadoras en la parrilla.

Irene Gómez es una azafata que lleva 17 años trabajando junto con el equipo Ducati en el circuito de Jerez, y ante la polémica, ha decidido lanzar una carta abierta en Facebook que suma más de 5.000 reacciones.

"¿En qué siglo estamos? Ah, sí... en el XXI... Porque lo dice el calendario, pues si tengo que tener en cuenta la absurdez sobre la mujer y el trabajo de imagen, pienso que vivo muchos siglos atrás", comienza su carta esta enfermera que se dedica también a trabajar como azafata en el circuito en la competiciones de MotoGP.

"Hay mucho hambre, paro, problemas con la sanidad española, la educación, la política... para volver a criticar un trabajo tan digno como es el ser azafata de imagen en un evento deportivo. Y ni mencionar que quitarnos es eliminar puestos de trabajo. Nadie nos obliga, no sufrimos, conocemos las condiciones de este trabajo antes de firmar. Nos piden un nivel cultural, idiomas y saber estar. No sólo 'aguantamos el paraguas', sino que atendemos a un público exquisito como son los invitados de nuestra escudería", señala Gómez en su escrito.

Gómez reivindica también la capacidad de elección de estas trabajadoras, opinando que: "¿Y qué me decís de que somos floreros? ¿Acaso es pecado poder aprovechar de manera digna la imagen que Dios nos dió? ¿Dónde está la libertad de elegir? ¿Por qué se machaca tanto a la mujer en este aspecto? Y si una mujer es guapa, ¿ya es tonta? ¿Ya no sabe hacer otra cosa? ¿Nadie ha pensado que nuestra educación, cultura y saber estar quizá lo dió la formación que tenemos? Muchas en Moto GP tenemos carreras universitarias, nuestros trabajos y nuestras vidas personales, pero hacemos esto porque queremos y nos da la real gana", argumenta en su carta.